El desalojo de las cuatro familias con 15 menores de la Azucarera de Granada tendrá lugar este jueves

Granada/Cuatro familias, 45 personas, de ellas 15 menores –entre los que hay bebés– y una persona anciana con afecciones de pulmón severas, serán desalojadas este jueves 19 de diciembre del recinto de la Azucarera de San Isidro de Granada por medio de una orden judicial.

Finalmente, los esfuerzos del área de Derechos Sociales del Ayuntamiento de Granada no han podido evitar este desenlace que dejará a casi medio centenar de personas sin techo porque de momento, no tienen una alternativa habitacional.

Precisamente esto es lo que se trata de solventar desde Servicios Sociales así como por parte del grupo municipal de Izquierda Unida: encontrar un lugar para que se trasladen. Es una maniobra a contrarreloj ya que, como indica Elisa Cabrerizo del grupo municipal de Podemos-IU, tan solo cuentan con el día de hoy para encontrar un nuevo lugar donde ser reubicadas.

El informe de Emergencia Social al que se encomendó Derechos Sociales finalmente no ha funcionado ya que al tratarse de un desalojo, este documento no tendría validez ya que apelaría solamente a casos de desahucios de vivienda.

Así, una de las formas de parar este desalojo, explica Cabrerizo, vendría de la petición expresa del propietario, en este caso el banco Santander, de que sucediera. Esta orden judicial, continúa la concejal, ha llegado por un informe técnico del Ayuntamiento que dice que al tratarse la Azucarera de un BIC en ruinas “no es seguro para vivir”. A raíz de esto el juzgado ha adoptado como primera medida el desalojo del edificio y de la posterior identificación de las personas.

Por parte del Ayuntamiento, prosigue, lo que cabe hacer es buscar una vivienda. A esta tarea se ha unido también la concejal socialista Nuria Gutiérrez, que junto a Cabrerizo y a organizaciones sociales como Médicos del Mundo están buscando alternativas.

Entre ellas, está la posiblidad de que a través de los convenios que tiene el Consistorio con otras entidades puedan encontrar la vivienda. Así, la concejal de Podemos-IU agradece la labor de las trabajadoras de los Servicios Sociales de la Chana por intentar buscar recursos porque “lo siguiente es que se quedan en la calle”.

Cabrerizo señala que se trata de una cuestión de “hipocresía” porque “estas familias vienen de vivir en lugares en ruinas y nunca se nos ha ocurrido desalojarlas”. Este edificio “nunca se ha protegido, se cae a pedazos, y solo nos acordamos de él cuando se meten familias pobres a vivir allí”, sentencia.

Del mismo modo, desde el PSOE señalan que el Ayuntamiento tiene que resolver este problema y que desde su grupo están dispuestos a ayudar en todo lo posible.