Detenida una mujer en Granada por intentar pasar droga a un preso

Llevaba 10 gramos de cocaína ocultos en "cavidades íntimas" envueltos en plásticos con forma de supositorio

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Uno de los supositorios intervenidos por Policía Nacional con droga
Uno de los supositorios intervenidos por Policía Nacional con droga / G. H.

Granada/Una mujer de 29 años de edad ha sido detenida por la Policía Nacional de Granada como presunta responsable de intentar introducir cocaína alojada en el interior de su cuerpo durante una visita íntima con su marido en la cárcel de Albolote. Para lograrlo, los agentes han contado con la colaboración de los funcionarios de prisiones. Como resultado también han intervenido dos envoltorios plásticos con forma de supositorio conteniendo 10 gramos de cocaína. La detenida ya ha sido puesta a disposición de la autoridad judicial.

La actuación se ha llevado a cabo dentro de la llamada Operación Zoco, que ha tenido lugar en el Centro Penitenciario de Albolote. La mujer detenida es de nacionalidad española y ya fue arrestada con anterioridad por un delito diferente al que ha propiciado, de nuevo, su apresamiento.

En el ejercicio de sus funciones, agentes de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Granada han llevado a cabo la Operación Zoco tras tener conocimiento de que se iba a llevar a cabo un pase de cocaína en el interior del Centro Penitenciario de Albolote durante una visita íntima entre un matrimonio. Una vez recibida la información, los policías contactan con funcionarios de la citada prisión y comprueban que efectivamente, figura una comunicación íntima entre el recluso en cuestión y su esposa.

Con anterioridad a la hora señalada para la visita, los agentes, junto con una funcionaria de la prisión, se introducen en lo que ya constituye el interior de la cárcel donde interceptan a la mujer a quien preguntan si porta algún tipo de sustancia estupefaciente, contestando voluntariamente que efectivamente porta dos envoltorios que le ha pedido su marido aprovechado su visita. Además, añade que los lleva alojados en sus cavidades íntimas, entregándoselos voluntariamente a la funcionaria de prisiones.

Los agentes comprueban que se trata de dos envoltorios plásticos cuya forma se asemeja a los supositorios que son intervenidos. Seguidamente proceden al pesado de la misma que arroja un peso de 10 gramos.

La detenida, que se enfrenta a un delito de tráfico de drogas agravado por el lugar de la comisión del hecho, en el interior de un centro penitenciario, ya ha sido puesta a disposición de la autoridad judicial.

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