El Gobierno Vasco concede el tercer grado al etarra que asesinó a Luis Portero

La Consejería de Justicia y del Gobierno vasco ha concedido el tercer grado al preso de ETA Harriet Iragi, asesino del que fue fiscal jefe del TSJA Luis Portero. Esta decisión ha generado la crítica de las asociaciones de víctimas del terrorismo. Con esta decisión del departamento que dirige la consejera socialista María Jesús San José, el condenado por ser autor de los disparon que acabaron con la vida de Portero podrá gozar de un estado de semilibertad al poder salir de la prisión de Basauri, en la que cumple condena desde finales de 2022, cuando el Gobierno acordó su traslado a una cárcel País Vasco, donde es el gobierno autonómico el que tiene las competencias en política penitenciaria.

Iragi, que formó parte del comando Erraia que cometió varios asesinatos en Andalucía en el año 2000, fue condenado en 2002 a la pena de 54 años por ser el autor material de los disparos que acabaron con la vida de Luis Portero el 9 de octubre de 2000 en el portal de la casa en la que residía el fiscal jefe del TSJA. Además, el etarra fue condeando por otros crímenes cometidos con penas superiores a los cien años (concretamente 128), entre ellos los asesinatos del concejal del PP de Málaga José Martín Carpena y el médico y coronel del Ejército del Aire Antonio Emilio Muñoz Cariñanos.

La concesión efectiva del tercer grado a Harriet Iragi queda pendiente de si la Fiscalía de la Audiencia Nacional decide recurrir la decisión adoptada por la Consejería de Justicia y Derechos Humanos del Gobierno Vasco.

Como no podía ser de otra manera, la decisión de la Consejería presidida por la socialista María Jesús San José ha sido duramente criticada por los colectivos de víctimas del terrorismo. Así, Covite (Colectivo de Víctimas del Terrorismo) que preside Consuelo Ordóñez, hermana de Gregorio Ordóñez (político del PP asesinado por ETA en San Sebastián en 1995), ha emitido un comunicado en el que ha expresado su "decepción total" con la nueva consejera de Justicia y Derechos Humanos del Gobierno vasco por la concesión de dos terceros grados a miembros de ETA "no arrepentidos", entre ellos Harriet Iragi y Luis Mariñelarena, uno condenado por el asesinato del político socialista Fernando Buesa.

Covite considera que "ninguno de los dos cumple con el requisito fundamental exigido por la ley para progresar en grado, que es el del arrepentimiento por sus crímenes", y ha reclamado a la Fiscalía de la Audiencia Nacional que "recurra estos dos últimos terceros grados para que se puedan revertir".

La presidenta de Covite, Consuelo Ordóñez, ha incidido en que "es público y notorio que la izquierda abertzale prohíbe a los presos de ETA el arrepentimiento y la colaboración con la justicia", y sin cumplir con estos dos requisitos "no se debería poder progresar al tercer grado, puesto que así está establecido en la ley". De este modo, ha insistido en que este pasado verano ambos presos de ETA "han sido exhibidos y jaleados" durante varias fiestas populares. "No se puede estar con Sortu y estar arrepentido", han resaltado desde Covite.

Por otra parte, la portavoz del Grupo parlamentario Popular en la Cámara vasca, Laura Garrido, ha presentado una pregunta a la consejera de Justicia, María Jesús San José, sobre el tercer grado concedido al preso de ETA Harriet Iragui condenado a un total de 128 años de prisión. En concreto, Garrido ha planteado esta cuestión para respuesta oral en pleno y le insta a valorar la autorización para progresión al tercer grado del preso de ETA Harriet Iragui Gurrutxaga, condenado por los atentados contra el concejal de PP de Málaga, José Martín Carpena, el fiscal jefe del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, Luis Portero García, y contra el coronel médico Antonio Emilio Muñoz Cariñanos.

 En su pregunta, Garrido señala que la consejera ha venido manifestando que en los expedientes que supongan la "semilibertad" de los internos se aplicarían "con rigor la legislación y garantías de la legislación penitenciaria y el cumplimiento de las sentencias". En este sentido, Laura Garrido le plantea que explique en sede parlamentaria ese "rigor y garantías" que "hacen acreedor a Iragui del tercer grado".

Un crimen que conmocionó Granada

El asesinato de Luis Portero se perpetró la tarde del 9 de octubre de 2000. El fiscal jefe del TSJA salió de trabajar y se dirigió a su casa de Granada. Hacia las 14.15 horas, cuando cruzó el portal y se paró para llamar al ascensor, un terrorista de ETA que lo esperaba sacó una pistola y le descerrajó dos tiros por la espalda antes de emprender la huida. Portero fue trasladado al Hospital de Traumatología de Granada, pero no sobrevivió a sus heridas. El autor material del crimen, Harriet Iragi, y el otro componente del comando (Jon Igor Solana) fueron detenitos días después (el día 16 de octubre) en Sevilla por efectivos de la Policía Nacional, poco después de asesinar al coronel médico Antonio Muñoz Cariñanos.

Los etarras Harriet Iragi Gurrutxaga y Jon Igor Solana Matarrán fueron condenados como autores materiales del crimen y Juan Antonio Olarra Guridi como inductor del atentado. El comando también había dejado un coche bomba en las inmediaciones del domicilio de Portero García.

El asesinato de Portero produjo una inmensa conmoción en Granada, donde miles y miles de granadinos mostraron su repulsa contra la banda terrorista ETA en que está considerada como la manifestación más multitudinario que ha habido en la ciudad.