"Quedamos en eso": El juez ve indicios "relevantes" para que el TSJA investigue al número dos del PSOE andaluz como "inductor" del secuestro de Maracena

El juez de Granada que instruye el caso del secuestro a una concejal de Maracena, el pasado febrero, por parte del novio de la alcaldesa del municipio, ha detallado en su último auto los indicios "suficientemente relevantes" para investigar al actual número dos del PSOE andaluz, Noel López; la regidora y candidata socialista, Berta Linares, y el concejal de Urbanismo, Antonio García Leyva, por su presunta participación en los hechos como inductores del delito o, en su defecto, por conspiración. Por la condición de aforado del primero, que es diputado andaluz, el magistrado acuerda deducir testimonio a la Sala de lo Penal del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA).

En el auto de 24 páginas, fechado este 25 de mayo y al que ha tenido acceso este periódico, el juez recoge las conclusiones extraídas de la investigación hasta la fecha, entre las que destacan la declaración del propio autor de los hechos, Pedro G. R., que reconoce la detención ilegal de la concejal y lo atribuye todo a un encargo hecho por los tres políticos. Señala especialmente a Noel López, de quien asegura que le convenció para dar un "susto" a la edil y quitarle el móvil donde suponían que tendría la documentación comprometida. Ha declarado que el dirigente socialista le aseguró que no le pasaría nada, con el compromiso de ponerle un abogado si el asunto se complicaba. "¿Quedamos en eso?", le habría dicho López al investigado -siempre según su versión- para despedirse de la cena que compartieron en enero pasado.

Tanto el juez como la Fiscalía, que está de acuerdo en las medidas adoptadas, toman en consideración la declaración del investigado, al menos para seguir investigando, porque hay otros factores y oficios policiales en las diligencias que apuntan hacia el mismo sitio. En concreto, se señalan las llamadas cruzadas y las reuniones que habrían mantenido la misma mañana del secuestro el autor de los hechos con la alcaldesa y ésta con el concejal de Urbanismo (identificado como Nono) y Noel López.

La investigación de tráfico y localización de los móviles de los tres políticos y el investigado por el secuestro, que fue acordada por el juez el 23 de marzo pasado, arroja datos muy relevantes para la investigación y sitúa a Noel López en Jaén al comienzo de la mañana del secuestro. Pero luego se desplaza a Granada en cuanto recibe el aviso de Nono y a partir de ese momento el juez asegura que hay "cruces de llamadas" entre los tres y en varios momentos del día las antenas de telefonía los sitúan en la misma posición. Uno de esos encuentros sería en el despacho de un abogado de Granada por la tarde. Respecto a Berta Linares, tanto las cámaras como los teléfonos, han constatado que se reunió con el investigado antes de ser detenido y mientras lo buscaba la Guardia Civil. También consta que después de hacer varias de esas llamadas la alcaldesa manda un mensaje de whatsapp a su pareja: "A las 14:00 horas nos vemos en mi piso".

El investigado da en su declaración todo tipo de detalles sobre los hechos ocurridos aquel día y el juez expone que en la parte que puede ser comparada con la versión de la víctima (la del secuestro en sí mismo) ambas declaraciones son "coincidentes". Preguntado por el motivo final que le llevó a la detención ilegal de la edil Vanessa Romero, Pedro G. R. asegura que lo hizo para quitar sufrimiento a su pareja, por la mala relación que tenían ambas compañeras de gobierno. Y además aseguró que los supuestos inductores le explicaron que lo que él ganaría al hacer eso sería "vivir de puta madre, ya que Berta seguiría siendo alcaldesa y a él le seguirían contratando y le abrirían muchas puertas", en alusión a su empresa de globos.

El investigado llega a apuntar en su declaración que, aunque no avisó a nadie de cuando ni como llevaría a cabo sus actos, sí le hicieron previamente sugerencias sobre cómo podría asustar a la concejal y hasta de dónde comprar una pistola falsa como la que adquirió. También explicó en sede policial y judicial que recibió de su pareja "una bolsita con cocaína que según le dijo ésta de manera literal era de parte de Noel, para que se la tomara y se envalentonara el día que iba a cometer los hechos".

La concejal secuestrada no llevaba documentación comprometida en su móvil, como según el investigado temían los tres políticos, pero aún así el novio de la alcaldesa se lo quitó y lo envolvió en papel de aluminio, porque había visto en una película que así no se podía localizar.

Esos expedientes en poder de Vanessa Romero desde el tiempo en que fue la concejal de confianza de Noel López (cuando este era alcalde de la localidad) estaban en papel dentro del propio maletero de su coche, en el que fue secuestrada. Tras el suceso, la Guardia Civil los ha analizado y ha elaborado un informe que está en poder del juez. Respecto a esto, en el mismo auto, el magistrado acuerda también otra deducción de testimonio para que se pueda investigar todo lo que revelan esos papeles en un procedimiento separado. El juez apunta a la "presunta existencia de hechos de carácter penalmente relevantes".

Por tanto, casi tres meses después de los hechos, el auto del juez de Instrucción número 5 de Granada, Josep Sola, levanta el secreto del sumario que había decretado y prorrogado mensualmente hasta ahora, acuerda mantener la imputación contra el investigado Pedro G. R. por el presunto delito de detención ilegal, deduce testimonio al TSJA por la presunta implicación como inductores de los tres cargos políticos y, por último, también acuerda separar en un nuevo procedimiento la investigación de la presunta corrupción urbanística en Maracena, que se deriva de los documentos aportados por la víctima.

La cena clave, después de Reyes

En la declaración de Pedro G. R., éste explica que en enero, "después de Reyes", hubo una reunión entre Noel López, la alcaldesa (de la que el juez destaca que es prima de Noel) y el concejal de Urbanismo en un mesón de Maracena. El investigado acudió a recoger a su novia por petición de ella, pero al parecer terminaron cenando juntos. En aquella reunión, según su versión, se expuso la preocupación por la actitud de Vanessa Romero, que se habría negado a firmar algunos papeles y que al parecer tenía expedientes en su poder. El detenido asegura que Noel le había ofrecido un puesto en la empresa de aguas pero que ella lo había rechazado.

El auto del juez reproduce así la continuación de la declaración de Pedro G. R.: "Entonces Nono indica que habría que darle un susto o un escarmiento, proponiendo incluso contratar a un par de ucranianos para que le den un susto. A continuación Noel le dice a Pedro que él mismo le dé un susto y le quite el teléfono móvil

para destruirlo, insistiendo éste en que como él tiene una enfermedad (bipolaridad) no le va a pasar nada, y que en el caso de que Vanesa denunciara, le pondrían un abogado y simplemente quedaría en un susto, estando Berta también de acuerdo con este plan".

La veracidad de esta reunión es un punto caliente de la investigación, dado que en un primer momento las pesquisas para acreditarla no han dado frutos. La información de los móviles no es concluyente pero tampoco permite descartarlo, según consta en el auto. Y en su declaración como testigo, el dueño del mesón ha negado que los cuatro estuvieran allí.

Aún así, tanto la Fiscalía como el juez instructor recomiendan investigar a estos tres dirigentes políticos como supuestos inductores del delito, "a la vista del contenido de las diligencias", sobre todo las relativas al uso de los terminales móviles y al contenido de los informes.