Un laberinto que sitúa a la ciencia en el tiempo

El proyecto plantea recorrer la estructura para situar de forma espacial la disciplina

Imagen aérea del laberinto compuesto de macetas, que se recorre paseando y situando los hitos históricos de forma espacial.
Imagen aérea del laberinto compuesto de macetas, que se recorre paseando y situando los hitos históricos de forma espacial. / Laura Anaya
S. Rodríguez

23 de agosto 2018 - 02:35

Granada/La inquietud por conocer el medio es un rasgo humano que acabó convirtiéndose en uno de los ejes de la existencia y la historia de la antropología. Esa inquietud dio lugar a lo que llamamos ciencia moderna y se produjo muchos años después de la aparición del Homo Sapiens, el homínido más similar a los humanos.

Para que la gente pueda hacerse una idea de cuánto tiempo pasó desde la prehistoria hasta la aparición de la ciencia, el Parque de las Ciencias ha preparado durante todo el mes de agosto El Laberinto que nos lleva a la ciencia, un proyecto que podrá ser visitado hasta el 31 de este mes.

A través de 4.000 macetas de barro que delimitan el recorrido para los visitantes, este nuevo espacio acompañado de una iluminación tenue y sonido ambiental invita al visitante a caminar para participar del contenido.

Cada metro del laberinto representa en torno a 500 años, de manera que el recorrido de 640 metros equivale a 320.000 años, la antigüedad atribuida al Homo Sapiens Sapiens, el ser humano moderno. La exposición completa alcanza los 1.000 metros cuadrados.

Diferentes hitos de la historia de la humanidad, como Altamira, la invención de la agricultura o la invención de la escritura aparecen marcados en el recorrido. Entre ellos destaca el punto donde se sitúa el origen de la ciencia, entendida como el método de comprensión del mundo natural actual.

Este espacio es el primero de un proyecto denominado Laberintos para pensar, un nuevo formato expositivo donde prima la máxima simplicidad formal y un contenido abierto a la interpretación del visitante.

El director del Parque de las Ciencias, Ernesto Páramo, aseguró ayer que con el laberinto se propone "una actividad simple, sencilla, relajada. Muy minimalista. Proponemos una actividad de reflexión y muy simple".

Páramo confirmó que este proyecto es un homenaje a uno de los grandes científicos y divulgadores de todos los tiempos, Carl Sagan, quien escribió el libro en el que se inspira este proyecto en 1995, mismo año en el que se inaugura el parque granadino.

Finalizado agosto, el Parque de las Ciencias comenzará a trabajar en el espacio que deja el laberinto para preparar Play. Ciencia y Música, la próxima gran propuesta expositiva del museo.

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