La norma de los 14 días que ha dejado a Granada en fase 1 se difumina en 48 horas

El Gobierno fue inflexible con la regla de los 14 días que afectaba a Granada la semana pasada y por eso esta provincia continúa hoy en fase 1. A pesar de los informes epidemiológicos y sanitarios positivos, reconocidos por el propio Ministerio de Sanidad, el viernes pasado este territorio no pasó el corte de la fase 2 por llevar sólo una semana en la primera fase. Pero no pasaron ni 48 horas cuando el mensaje comenzó a cambiar y tanto el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, como el ministro de Sanidad, Salvador Illa, se mostraron abiertos a relajar esa norma de las dos semanas y acelerar el proceso en determinados territorios.

El ministro de Sanidad, Salvador Illa, dijo el domingo que el Gobierno va a estudiar la posibilidad de que algunos territorios aceleren su proceso de desescalada permitiendo que avancen de fase antes de que hayan transcurrido dos semanas en aquellos casos en que la situación epidemiológica lo permita.

En la rueda de prensa posterior a la Conferencia de Presidentes autonómicos, encabezada por el jefe del Ejecutivo central, Pedro Sánchez, Illa fue preguntado sobre si el Gobierno se plantea acortar el periodo mínimo que se exige que transcurra desde que una provincia o área sanitaria inicia una fase hasta que avanza a la siguiente, lo que ha afectado principalmente a provincias como Málaga y Granada, que se ven obligadas a un avance desigual con respecto al resto de Andalucía.

El ministro recordó que el plan de desescalada estipula que se debe permanecer un mínimo de catorce días en cada fase y eso es lo que está vigente actualmente. Pero a continuación añadió: "En función de cómo evolucione la epidemia en cada una de las unidades territoriales, vamos a estudiar si hay opciones de modificar esto".

Según ha señalado, la voluntad del Gobierno es "aplicar el estado alarma allí donde sea necesario el mínimo tiempo necesario". "Vamos a ir viendo cómo evoluciona la situación epidemiológica de cada unidad territorial y, en función de eso, tomando las decisiones oportunas", ha añadido.

Un acuerdo adoptado el martes pasado por el Consejo de Ministros contemplaba ya que para el 7 de junio, cuando vencerá la quinta prórroga del estado de alarma, haya territorios que puedan haber concluido su plan de desescalada y vean que se levantan para ellos las restricciones a la movilidad, de manera que podrían viajar a cualquier otro punto del país.

Eso implica que en determinadas zonas se avanzaría más rápido de lo previsto, sin esperar los 14 días establecidos como duración mínima de cada fase.

Unos días antes, el doctor Fernando Simón, principal asesor científico del Gobierno en la epidemia de coronavirus, había dicho en rueda de prensa que no descartaba esa aceleración del proceso en algunos territorios si la enfermedad y su tasa de contagio siguen evolucionando de forma favorable.

Por su parte, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, pocas horas después del anuncio del avance desigual en Andalucía, lanzó un mensaje el sábado en el que aseguraba que "empatiza" con el sector turístico de Granada y Málaga pero insiste en que "deben permanecer" una semana más en la fase 1 por "un principio de prudencia y precaución".

Esto fue el sábado, porque el domingo, tras la conferencia de presidentes lanzó un mensaje diferente: "Si nada se tuerce" algunas comunidades estarán fuera del estado de alarma "en unos días", en referencia a una aceleración en la desescalada que sólo es posible con la derogación inmediata y de facto de la regla de los 14 días.