Programa con dimensión europea, presupuesto e infraestructuras, los criterios clave para que Granada consiga la capitalidad cultural 2031

Granada/Ya se conocen las reglas del juego. Granada y las otras cinco aspirantes (Jerez, Burgos, Cáceres, Toledo, Las Palmas de Gran Canaria y Oviedo) a conseguir la Capitalidad Cultural Europea 2031 se han encontrado este 27 de diciembre con la convocatoria del Ministerio de Cultura para la designación de este título, que en 2031 corresponde de forma conjunta a España y Malta. Una orden ministerial que establece los criterios de selección, plazos y principales requisitos que tendrán que cumplir las aspirantes a la capitalidad, que tiene dos objetivos: proteger y promover la diversidad de culturas en Europa y fomentar la contribución de la cultura al desarrollo a largo plazo de las ciudades. Todo buscando elevar el perfil internacional de las ciudades a través de la cultura y ampliar el acceso a la misma.

Además, la ciudad ganadora recibirá el título de Capital Europea de la Cultura y lo que se conoce como "el premio": 1,5 millones de euros en honor a Melina Mercouri, según se explica en el documento publicado en el BOE, analizado por este periódico. Un premio financiado con cargo al programa de la Unión Europea de apoyo a la cultura. Un premio que se concede, junto al título de Capital Europea de la Cultura, por los mismos criterios.

Lo principal que aclara la convocatoria son los plazos. Se da un año a partir de esta publicación para que las ciudades aspirantes envíen sus solicitudes en una primera fase de preselección, que se extenderá por tanto hasta el 28 de diciembre de 2025. Después de esa fecha, el Ministerio de Cultura indicará, mediante resolución, las ciudades preseleccionadas y el plazo para la selección final.

Con todo, según ha asegurado esta misma mañana la alcaldesa de Granada, Marifrán Carazo, al hacer una primera valoración de la convocatoria, Granada mandará de inmediato una comunicación al Ministerio de Cultura expresándole su intención de participar en este proceso selectivo para Capital Cultural 2031, independientemente de que se siga trabajando en la elaboración de la candidatura, en la que se trabaja intensamente en el último año. La solicitud se enviará en español y en inglés (esta última será la versión de trabajo del comité de expertos creado para el realizar la selección) no excediento las 60 páginas en formato A4. Si se pasa a la fase final, se aumenta hasta las cien páginas.

En cuanto a los criterios de solicitud, pueden concurrir a la convocatoria todos los municipios españoles que quieran ejercer el derecho a ser designados Capital Europea de la Cultura para 2031. Solo hay un criterio de exclusión y afecta a la situación económica de los mismos. Las ciudades candidatas tienen que certificar que no están en ninguna de las situaciones contempladas en dos artículos del Reglamento Financierao 2024/2509 aplicable al presupuesto general de la Unión Europea. Un aspecto que ya se está estudiando por parte del Ayuntamiento de Granada.

Criterios a valorar: programa con dimension europea, presupuesto e infraestructuras adecuadas

¿Y qué se valorará? Las solicitudes deberán basarse en un programa cultural con una fuerte dimensión europea y que durará todo el año del título, es decir, todo 2031. En total son seis categorías: contribución a la estrategia a largo plazo, dimensión europea, contenido cultural y artístico, capacidad para alcanzar los objetivos, trabajo de proximidad y gestión.

Así, se incluye un cuestionario específico para la fase de preselección, en la que se deberá dar respuesta por escrito a preguntas como por qué la ciudad desea participar en el concurso, explicar el perfil cultural de la ciudad o el concepto del programa.

Contribucción a la estrategia a largo plazo. En este apartado se tendrá en cuenta que ya se esté aplicando una estrategia cultural en la ciudad y planes para mantener las actividades culturales más allá de año del título; planes para reforzar la capacidad de los sectores cultural y creativo y el vínculo entre el sector cultural y el económico y social de la ciudad; las repercusiones culturales, sociales y económicas a largo plazo, incluido el desarrollo urbano que se prevé que tenga el título en la ciudad y los planes para el seguimiento y la evaluación del impacto del título y la difusión de resultados. "Si su ciudad recibe el título, ¿cuál cree que sería el impacto social, cultural y económico a largo plazo en la ciudad (incluso en términos de desarrollo urbano)?", es por ejemplo una pregunta a contestar.

Dimensión europea. Aquí se evalúa el alcance y la calidad de las actividades de promoción de la diversidad cultural de Europa, del diálogo intercultural y de una mayor comprensión mutua entre los ciudadanos europeos; el alcance y la calidad de las actividades que resalten aspectos comunes de las culturas, el patrimonio y la historia de Europa; actividades realizadas con artistas europeos y la cocoperación conn otras ciudades y la estrategia para atraer el interés de un amplio público europeo e internacional.

Contenido cultural y artístico. En este criterio se evaluarán factores como tener una visión y estrategia artística clara y coherente con el programa cultural; la participación de artistas locales en la elaboración y aplicación del programa y la amplitud y diversidad de las actividades propuestas y su calidad artística general, así como la capacidad para combinar el patrimonio cultural local y las formas de arte tradicinales con expresiones culturales nuevas.

Capacidad para alcanzar los objetivos. La ciudad deberá demostrar que cuenta con amplio y firme apoyo político y compromiso de las autorides locales, regionales y nacionales y que tiene o tendrá infraestructuras adecuadas y viables para acoger el título. En este capítulo, Granada tenddrá que "confirmar y aportar pruebas de que cuenta con un amplio y sólido apoyo político y un compromiso sostenible por parte de las autoridades públicas locales, regionales y nacionales pertinentes" y proporcionar "evidencia de que su ciudad tiene o tendrá una infraestructura adecuada y viable para albergar el título. Para ello tendrá que responder tres preguntas claras: "Explique brevemente cómmo la Capital Europea de la Cultura utilizará y desarrollará la infraestructura cultural de la ciudad, ¿cuáles son los activos de la ciudad en términos de accesibilidad (transporte regional, nacional e internacional)? y ¿cuál es la capacidad de absorción de la ciudad en téminos de alojamiento turístico?". En estas tres preguntas clave, la primera sobre infraestructura cultural deberá incluir todos los espacios museísticos y culturales actuales. La segunda es vital para la candidatura de Granada y quizá la que exprese su mayor debilidad en todo el proceso: la accesibilidad y el transporte, que aunque mejor sigue sin despegar y es tema de reivindicación política. De hecho, hay que recordar aquí que según los informes de la malograda Agencia Estatal de Inteligencia Artificial, que perdió Granada, se indicaba como debilidad precisamente las conexiones. La tercera pregunta estaría superada ya que la red de alojamiento de la ciudad es de las más amplias y está muy bien dimensionada.

Por último, pide en relación a las infraestructuras culturales, urbanas y turísticas cuáles son los proyectos (incluidos los de renovación) que la ciudad tiene previsto llevar a cabo en relación con la acción de la capitalidad de aquí al 2031.

Trabajo de proximidad. Se evaluará la implicación de la población local y de la sociedad civil en la preparación de la solicitud; la creación de oportunidades nuevas y duraderas para que una amplia franja de ciudadanos pueda asistir a las actividades culturales o participar en ellas, especialmente los jóvenes, voluntarios y personas desfavorecidas; y la estrategia para ampliar la audiencie especialmente con la educación y la participación de los colegios.

Gestión. Aquí se valora la viabilidad de la estrategia de recaudación de fondos y del presupuesto propuesto, que incluirá planes para solicitar el apoyo financiero de programas y fondos de la Unión; la gobernanza y la estructura de gestión previstas; el nombramiento de un director general y un director artístico; la estrategia de publicidad y de comunicación y que el personal de la estructura de gestión cuente con la experiencia adecuada para planificar, gestionar y ejecutar el programa cultural.

En el capítulo de finanzas, se pide aportar el presupuesto anual de la cultura en la ciudad en los últimos cinco años excluyendo los gastos para la candidatura. Si se van a utilizar fondos del presupuesto para financiar el proyecto de la capitalidad, hay que indicar el importe a partir del año 2025 hasta el 2031. Y también el importe que se destinará después del 2031 a la cultura (en euros y en porcentaje sobre el presupuesto anual global". También pide los ingresos para cubrir los gastos de funcionamiento y de capital y pide tanto los aportados por el sector público Gobierno, ciudad, región, UE u otros) como por el privado. Y pide una aclaración: "¿Las autoridades de finanzas públicas (municipio, región, estado) ya han votado o asumido compromisos financieros para cubrir los gastos de funcionamiento? Si no es así, ¿cuándo lo harán?". Tambien reclama detallar la estrategia de recaudación de fondos privados a través de patrocinadores.

Tambien se pide detallar las fortalezas y debilidades del proyecto y cómo superar las debilidades identificadas.

Comité de expertos y entrevistas

Para seleccionar las candidatas tanto en la preselección como en la fase final se constituirá un comité compuesto por diez expertos designados por las instituciones y organismos de la Unión Europea. El estado miembro, en este caso España, tendrá derecho a nombrar hasta dos expertos. Los mismos expertos del comité recomendarán a la Unión la concesión del premio Melina Mercouri.

Las ciudades candidatas serán oídas por el comité durante una reunión convocada por el Ministerio mediante una entrevista destinada a valorar cada candidatura. Tendrá una presentación oral del programa cultural durante 30 minutos y durante una hora el comité hará las preguntas que estime. La delegación para defender la candidatura de cada ciudad estará limitada a diez personas, sin contar con un técnico que puede apoyar la presentación pero sin tomar la palabra. Se evalurarán las seis categorías antes aludidas. En esta fase no se realiza visita a las ciudades y el comité acordará una lista restringida con un informe sobre esas ciudades. La decisión de las preseleccionadas deberá ser por consenso y si no lo hay, se hará votación de cada ciudad a mano alzada. Después, el comité de expertos presentará informe al Ministerio de Cultural y a la Comisión Eurpea, se publicará el informe y se aprobará la lista de ciudades candidatas a pasar a la selección final, lista que se conocerá por nota de prensa y en la web del Ministerio de Cultural.

Las ciudades que pasen a la fase final deberán completar su expediente de candidatura según las recomendaciones de los expertos y ajustarse a otra serie de preguntas. En esta fase final ya sí podrán visitarse las ciudades preseleccionadas, una vez finalizada la presentación de candidaturas completas y revisadas y antes d ela reunión final de selección. Las visitas las realizarán de dos a cuatro expertos del comité y será de un día. De nuevo las ciudades pasarán ante el comité de expertos con una entrevista para presentación oral del programa completado durante 45 minutos y 90 minutos de preguntas del comité. La decisión final se tomará por consenso y si no votación, con hasta cuatro rondas en caso de empates. Sobre esa decisión final, se elaborará un nuevo informe remitido al Ministerio y a la Comisión Europea y el Ministerio designará la ciudad Capital Europea de la Cultura para 2031 conforme a esa recomendación, que se notificará al Parlamento Europeo, al Consejo, la Comisión y al Comité de las regiones en un plazo de cuatro años antes del título (es decir, en 2027).

Después, el comité de expertos hará un seguimiento de la preparación de la ciudad ganadora y le dará apoyo hasta el inicio del año del título, con tres reuniones entre el comité y la ciudad para que haga balance de los preparativos. En la última reunión se emitirá un informe sobre el cumplimiento de los compromiso asumidos. La ciudad también tendrá controles y auditorías por parte dela Comisión Europea, la Oficina Europea de Lucha contra el Fraude (OLAF) y el Tribunal de Cuentas.