El PSOE abandona el Pleno del Ayuntamiento de Granada tras la expulsión de una mujer del público que pedía medidas para las personas sin hogar
La alcaldesa ha dejado claro que no ha ordenado la salida de la asistente, algo de lo que los socialistas la acusan
El Ayuntamiento de Granada aborda en su próximo pleno la aprobación inicial de las nuevas ordenanzas fiscales
Granada/El Grupo Municipal Socialista del Ayuntamiento de Granada, conformado por diez concejales, ha abandonado el Pleno ordinario del mes de octubre, que se celebra este viernes, cuando apenas había transcurrido una hora del mismo, a consecuencia de la expulsión de una mujer asistente entre el público que reivindicaba que el equipo de Gobierno pusiera medidas para mejorar la situación de las personas sin hogar en la capital.
La salida de los socialistas se ha producido después de que se votara la tramitación del cambio en las ordenanzas fiscales para 2025, en cuyo debate ha estado muy presente la situación de estas personas. Hasta que los concejales han abandonado el pleno, este se ha desarrollado en un ambiente de tensión, con parones a consecuencia también de las intervenciones del público sobre este tema mostrando también octavillas con las reivindicaciones, y que según el reglamento ambas no están permitidas.
En un momento dado, una persona, según el equipo de Gobierno un agente de la Policía Local y según la oposición el escolta personal de la alcaldesa, se ha acercado hasta el público asistente y ha solicitado a una de las asistentes, tras recordarle que no podía hablar durante la sesión, que la acompañara fuera del Salón de Plenos. La mujer, miembro de la asociación La Calle Mata, ha acompañado a esta persona y ha salido de la estancia, tras la cual todo el público miembro de esta organización también ha abandonado el lugar, y ha comenzado un cruce de reproches entre los concejales socialistas y el equipo de Gobierno que ha finalizado con la salida de los concejales de este grupo municipal.
La alcaldesa, Marifrán Carazo, ha indicado que después ha pedido al portavoz del equipo de gobierno, Jorge Saavedra, que abordara con los concejales socialista una vuelta al pleno para continuar con la sesión con normalidad, lo que no ha sido posible. Tras la marcha del Grupo Municipal Socialista, la sesión ha continuado con el debate del resto de los puntos del día sin la participación de los concejales socialistas.
"No tengo miedo a defender lo que hay que defender"
Tras el incidente, el PSOE ha convocado de urgencia a los medios de comunicación en el patio del Ayuntamiento para que la mujer expulsada de la sesión, Casimira Quiñones, pudiera explicar lo sucedido y dar su punto de vista, asegurando "no tener miedo a lo que hay que defender". "Yo ni me he puesto nerviosa ni nada, porque estoy reivindicando algo que me preocupa de corazón. He dicho lo que siento, estoy muy preocupada por las personas sin hogar, y en un momento he dicho que cómo podéis estar felices habiendo gente en la calle, que basta ya y que se atienda a estas personas".
"Entonces ha venido un policía, me ha pedido que lo acompañara, me ha sentado en una silla y ha llamado a más policías. Eso ha sido el hecho. No me han comunicado si me van a abrir expediente o no, porque luego mis compañeras de La Calle Mata se han levantado todas y me han sacado fuera. Yo quería quedarme allí a ver hasta donde llegaban, y sin ningún miedo. Y luego el PSOE se ha levantado en apoyo, han gritado no hay derecho, y se han salido. Y aquí estamos todos indignados. Vaya una democracia tenemos en este Ayuntamiento. Esto es fascismo puro", ha declarado la expulsada.
La alcaldesa asegura no haber ordenado la expulsión
Poco después, la alcaldesa de Granada, Marifrán Carazo, a través de un audio enviado a los medios de comunicación, ha querido aclarar que ella, como presidenta de la sesión, "en ningún momento he solicitado a la Policía Local el desalojo" y que incluso durante el transcurso del mismo "he permitido que hablara durante el pleno y hemos escuchado lo que estaba diciendo".
"En ningún caso se ha ejercido la fuerza ni se ha dado instrucciones de desalojar el Salón de Plenos, porque quiero que quede claro que quien tiene que solicitar ese desalojo soy yo misma. Por tanto, yo quiero que los debates se produzcan ajustados a la realidad. Son normas que todos tenemos que cumplir, y nosotros mismos tenemos que dar ejemplo cumpliendo también con las normas en lo relativo a cumplir los tiempos, el silencio, favorecer el debate y no interrumpirlo. Tenemos que ser nosotros mismos los que lo cumplamos, y después aquellos que acuden como invitados", ha declarado Carazo.
La alcaldesa también ha recordado que, desde el inicio de la sesión plenaria, se les ha recordado a todos los asistentes del público y de la asociación La Calle Mata que no podían intervenir durante la sesión, y ha vuelto a remarcar que "esta alcaldesa no ha solicitado que se desaloje a nadie, tal y como ha recriminado el PSOE".
El PSOE acusa de "imponer el autoritarismo en la ciudad"
Tras la situación vivida en el pleno, el portavoz del Grupo Municipal Socialista, Paco Cuenca, ha condenado "las actitudes autoritarias impuestas por Carazo", y ha condenando que la alcaldesa haya permitido y justificado esta acción hacia "una señora que educadamente pedía medidas para contener este aumento de muertes, que coinciden además con el cierre del centro de atención a personas sin hogar de la calle Varela, así como con el desmantelamiento de otros recursos del área de Servicios Sociales que existían para atender a estas personas y que han sido eliminados por el PP desde que llegó al gobierno de la ciudad".
Para Cuenca, “es inaceptable e indefendible lo que ha ocurrido en el pleno, por lo que hemos abandonado la sesión en señal de protesta porque no vamos a consentir que el Gobierno de Carazo imponga este autoritarismo en un estado democrático”. Al respecto, el máximo responsable del PSOE ha señalado que Carazo quiera tapar “el caos y el clima de crispación que se ha impuesto en la capital tras un año y medio de gobierno, impidiendo el acceso al salón de plenos a ciudadanos o cerrando las puertas del Ayuntamiento, como ha ocurrido hoy en un hecho insólito y sin precedentes”.
El socialista ha lamentado además que Carazo haya intentado culpar de la actuación contra la ciudadana a los agentes de la Policía Local, “quienes cumplen órdenes”, ya que, “el que ha iniciado el desalojo ha sido su escolta personal, en una actuación que ella y el grupo del PP podían haber parado en cualquier momento, y que, en ningún caso, han parado”. Así, ha recordado a la alcaldesa que “el deber de un alcalde es escuchar y atender las demandas de los ciudadanos. Echar a la gente de la sala de plenos, cerrar las puertas del Ayuntamiento o entrar al Consistorio por la puerta de atrás para evitar a la gente, es un comportamiento bochornoso que lo dice todo”.
Para concluir, Cuenca ha mostrado también su solidaridad también a Bomberos y trabajadoras de la Limpieza del Ayuntamiento a los que tampoco se les ha permitido acceder al salón consistorial hoy, “en un ejemplo más de que Carazo quiere silenciar y ocultar las numerosas protestas que se ciernen sobre su gestión”.
Según el Artículo 118 del Reglamento orgánico del Ayuntamiento de Granada, consultado por este periódico, "el público asistente a las sesiones no podrá intervenir en estas, ni tampoco podrán permitirse manifestaciones de agrado o desagrado". Además, este artículo permite al presidente "proceder, en casos extremos, a la expulsión de los asistentes que por cualquier causa impidan el normal desarrollo de las sesiones". Este reglamento fue modificado en 2014 y se mantiene vigente hasta día de hoy.
Concentración en la Plaza del Carmen
Mientras todo esto ocurría dentro del edificio consistorial, a las afiueras, en la Plaza del Carmen, tanto la asociación La Calle Mata como activistas de Pro Derechos Humanos de Andalucía han reclamado al Ayuntamiento granadino medidas urgentes para atender a las personas sin hogar, con diez fallecidos este año en las calles de esta capital andaluza que afronta la bajada de temperaturas.
La portavoz de La Calle Mata, Loli Ortiz, ha explicado que el objetivo de sus protestas es mostrar el riesgo de vivir en la calle, concienciar y lograr nuevas herramientas que ofrezcan a los afectados una salida, dignidad y posibilidades. Con ese reto, voluntarios de los dos colectivos se concentraron junto a la sede del Consistorio y han celebrado una asamblea con personas sin hogar antes de pasar la noche al raso y con el cobijo de algunas cajas de cartón.
"En Granada hay más de 300 personas que viven en la calle, una cifra que cambia cada semana, y a todas luces los medios que tienen son insuficientes", ha añadido Ortiz. Las dos asociaciones han recordado a Isabel, Francisco, Jesús, Florín y al resto de las personas sin hogar que han fallecido este año en Granada y lo han vuelto a hacer este viernes durante el pleno ordinario.
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