Tensión en los juzgados de la Caleta de Granada por el traslado del detenido al que sus familiares quisieron liberar en el hospital de Trauma

Granada/El juez que lleva el caso del detenido al que sus familiares intentaron liberar en un hospital de Granada ha decretado esta mañana prisión para él. El traslado del reo desde los calabozos de la Policía Nacional en la capital hasta los juzgados de La Caleta, donde ha pasado a disposición judicial, ha requerido de un dispositivo especial tanto de agentes del Cuerpo como de la Guardia Civil, que es la fuerza encargada de realizar, asimismo, el desplazamiento de los encarcelados hasta la prisión provincial de Albolote. Un dispositivo que ha llamado la atención por la cantidad de efectivos implicados en el mismo y que han tratado de garantizar que no se produzcan las mismas escenas que se produjeron en el Hospital de Neurotraumatología esta semana, cuando familiares del arrestado, sobre el que pesaban varias requisitorias pendientes con la justicia, intentaron liberarlo de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.

Fuentes policiales consultadas por este diario apuntan como motivo de este despliegue que "ciertas personas tenían intereses" en el detenido, aunque sin precisar si se trataba de "familiares" que querían liberarlo como sucedió en el altercado del pasado martes, o por personas que querían tomar posibles represalias contra él. En todo caso, una vez ha pasado el reo a disposición judicial, el juez ha dictaminado su ingreso en la cárcel, cuyo traslado han efectuado los agentes de la Guardia Civil del servicio especial para este tipo de operaciones.

Los hechos se desataron el martes cuando un hombre, de unos 29 años de edad y con numerosos antecedentes policiales, y sobre el que además pesaban varias requisitorias pendientes con la justicia, se encontraba en los calabozos del Cuerpo Nacional de Policía después de ser detenido, tal y como ha confirmado fuentes de esta a Granada Hoy. En el uso de su derecho a recibir asistencia sanitaria, el arrestado aludió a una dolencia que le estaba afectando y pidió ser atendido por un médico. Por ello, fue trasladado al cercano Hospital de Neurotraumatología.

Al llegar al centro hospitalario, los agentes se encontraron con que había decenas de familiares esperándolo en la puerta, por lo que tuvieron que acceder por una puerta trasera y establecer un cordón de seguridad para evitar que los allegados del arrestado entraran, produciéndose escenas de mucha tensión. A la vez, la Policía Nacional pidió refuerzos para frustrar una posible fuga. El detenido fue atendido ya en el interior del hospital por el personal sanitario, a los que supuestamente comenzó a increpar y a amenazar, según el relato policial del día de autos. Según ha confirmado fuentes policiales a este diario, las pruebas que le practicaron al detenido no arrojaron ningún tipo de dolencia o afectación.

El hombre fue de nuevo trasladado a los calabozos de la comisaría del Cuerpo Nacional de Policía de la capital, donde ha pasado los dos últimos días a la espera de ser puesto a disposición judicial, algo que se ha producido durante la mañana de estre viernes. Los agentes del Cuerpo, entre fuertes medidas de seguridad para evitar incidentes como los acaecidos en el hospital, han extremado las precauciones ante varias decenas de personas que esperaban ante los Juzgados de la Caleta, sin que se produjeran incidentes debido a la amplia presencia de efectivos policiales y de Guardia Civil. Una vez decretada prisión para el reo, ha sido enviado a la cárcel de Albolote.