Una treintena de personas se concentran para justicia para Juana Rivas y su hijo

Una treintena de personas, convocadas por varias asociaciones feministas, se han concentrado este martes en Plaza Nueva, junto a la sede del Tribunar Superior de Justicia de Andalucía para mostrar su apoyo a Juana Rivas en su lucha por que su hijo menor no vuelva con su padre a Italia tras pasar las vacaciones de Navidad en Maracena.

Bajo el lema 'Daniel se queda' y 'Juana somos todos', los manifestantes, en su mayoría mujeres, han exhibido una pancarta central con el lema: 'Justicia real ya. Medidas protectoras. Todas somos Juana'. También se pudo leer otros carteles durante la concentración en los que se podía leer: "Jueces, escuchad, Daniel necesita a su madre". Durante el acto, se ha leido un manifiesto en el que reclaman "justicia real frente a un sistema que, en demasiadas ocasiones, sigue desprotegiendo a las mujeres y a sus criaturas".

La convocatoria se realizó poco después de que el Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 2 de Granada haya rechazado el recurso presentado por Juana Rivas y su hijo mayor contra el archivo de la denuncia interpuesta el pasado diciembre contra su expareja, el italiano Francesco Arcuri, reiterando que no se aprecian indicios de delito que sean competencia de ese juzgado. La resolución, dada ha conocer el pasado lunes desestima el recurso presentado por el equipo legal de Juana Rivas contra el auto judicial que, el pasado 30 de diciembre, decretó el archivo de la causa.

Por su parte, la representación de la expareja de Juana Rivas, Franceso Arcuri, que ejerce el abogado Enrique Zambrano, apuntó en esta fase del recurso que el menor debió volver a Italia el pasado 2 de enero y que llegó a España con un permiso especial de la Corte de Apelación de Cagliari que advirtió a Juana Rivas de que debía abstenerse de hacer público el viaje del niño. El menor de los hijos de la expareja, que ha cumplido este mes once años, llegó a España el pasado 22 de diciembre para pasar unas vacaciones con su madre y su hermano, que reside en Maracena con Rivas desde que cumplió la mayoría de edad.

Aunque el niño tenía que haber regresado a Italia con su padre, el equipo jurídico de Rivas interpuso nuevas denuncias y solicitó medidas cautelares de protección del menor, a la que respondió el Juzgado de Instrucción 4 de Granada, que contra la orden de la Corte de Apelación de Cagliari, que exigía que el niño estuviese con su padre antes del 8 de enero, paralizó esa marcha de manera cautelar después de escuchar al menor en sede judicial. Además, se inhibió a favor del Juzgado de Violencia sobre la Mujer 2 de Granada, que el pasdo jueves dictó un auto en el que rechazó el caso, una decisión que no afecta a las medidas cautelares tomadas. Instrucción 4 de Granada tendrá ahora que volver a pronunciarse y, si tampoco acepta la causa, será el Decanato o un tribunal superior -previsiblemente la Audiencia- el que resuelva el conflicto de competencia.