Nervios y esperanza en las residencias de Granada escogidas para la vacuna

Granada/Los nervios, la ilusión y la esperanza. El estado de ánimo ha cambiado de un día para otro en las residencias 'agraciadas' con las primeras dosis de la vacuna del coronavirus en Granada. Meses y meses de lucha, de protocolos, de brotes y en algunos casos, de muerte tienen hoy el punto de partida hacia un futuro ojalá mejor.

La directora de la residencia Beato Fray Leopoldo de Granada, Emilia Puertas, estaba ayer "nerviosa" tras conocerse el anuncio de la Junta de que su residencia será la primera de Andalucía en administrar la vacuna contra el coronavirus. "Tengo tanta ilusión como con los Reyes Magos", añade la encargada del hogar de ancianos, donde no dejó de sonar ayer el teléfono tanto de familiares como de periodistas.

"A ver si al llegar la vacuna, que tanto la necesitan los mayores, que es el colectivo más vulnerable, estamos un poco mejor", asevera Emilia Puertas, que afirma sentir "agradecimiento" a las autoridades "por ser la primera residencia" y por representar "el esfuerzo tan grande que hemos hecho, y que seguiremos haciendo, en España entera". "Nos desvivimos por ellos y queremos que esto pare ya", contó la directora de la Beato Fray Leopoldo, donde la media de edad de los residentes es de entre los 87 y 88 años, y que desde hace unos días cuenta con una residente centenaria.

La misma alegría se palpaba en las palabras de Javier Baena, director de la residencia La Milagrosa de Armilla, que sufrió con crudeza los embates de la primera ola con 8 muertes, pero que está libre de coronavirus desde el 26 de junio. "Ha sido una acontecimiento que nos ha cogido casi por sorpresa", cuenta Baena. Podría decirse que la vacuna para sus residentes ha sido un regalo de Navidad porque tienen constancia que iban a recibir las primeras dosis desde el día de Nochebuena.

"Fui personalmente a la residencia y en cada planta hice una exposición, lo comuniqué a internos y trabajadores. Aunque tenemos un alto porcentaje de demencias, los internos que tienen bien sus habilidades cognitivas están deseándolo", dice Baena, que recuerda que fueron de las primeras residencias "donde entró el coronavirus como un tsunami".

"Es un detalle que seamos de los primeros porque nos vimos desbordados, no teníamos información ni test. Estamos emocionados y los compañeros también porque es una primera luz, un poco de tranquilidad. Llevamos 9 meses en un estrés continuo, porque aunque los protocolos sean estrictos, nunca estás seguro de que puedan volver a entrar", relata el directo de La Milagrosa.

Cada semana, Granada recibirá nuevas dosis que se irán aplicando poco a poco a las personas más vulnerables, sobre todo las personas mayores y en edad de riesgo.