Los voluntarios de la Universidad de Granada que también acudieron a ayudar a Valencia "tres días frenéticos"

Buscaron maquinaria pesada y hablaron con las ferreteras proveedoras de la UGR

Aplazadas unas oposiciones en la Universidad de Granada al presentarse "varios recursos administrativos"

Los tres voluntarios, en Valencia.
Los tres voluntarios, en Valencia. / R. G.

Juan Javier Luque Díaz, Ángel Gutiérrez Montes y Julio Salmerón Fernández son tres miembros de la plantilla de Administración y Servicios (lo que se conoce como PTGAS) de la Universidad de Granada. El pasado 7 de noviembre, posiblemente conmovidos por lo ocurrido el 29 de octubre en Valencia, se montaron en su vehículo y pusieron rumbo hacia la zona afectada por la tromba de agua. Allí, hasta el domingo 10, hicieron todo lo que se pidió y más para ayudar a pueblos y familias que lo habían perdido todo.

Este viernes, Pedro Mercado, rector de la Universidad de Granada, les reunió para agradecerles su gesto, “pero sobre todo su generosidad en un momento tan difícil como el de esos días”. Mercado se mostró “orgulloso y feliz” de estos miembros de la comunidad universitaria que “acudieron donde se les necesitaba sin que nadie los llamara y que representan lo mejor que tenemos en la comunidad universitaria. Gente comprometida y solidaria que hace a la UGR sentirse orgullosa de ellos y de su trabajo”, recoge un comunicado remitido por la Universidad.

Los tres voluntarios explicaron cómo organizaron la marcha y qué labores desempeñaron en Valencia. Fue Javier quien dio el primer paso. Allá en su pueblo, Villanueva del Trabuco (Málaga), localizó la maquinaria pesada que necesitaba: una retroexcavadora y una giratoria. Sus propietarios no dudaron un segundo para cederlas. Buscó entonces un camión para el transporte de las dos máquinas. También encontró el camión y la generosidad de su dueño. A partir de ahí, acudió a las ferreteras proveedoras de la UGR quienes también ofrecieron lo que tenían.

Con ello, tras terminar su turno de trabajo aquel jueves, recuentan los tres, partieron hacia Valencia donde llegaron a última hora de la noche. A partir de ahí, dicen, “tres días frenéticos de retirada de lodo, vehículos y enseres, limpieza de calles y vuelta a empezar” en la zona cero del desastre: Paiporta, Alfafar, Benetússer y Catarroja.

De vuelta a Granada, los tres recuerdan la magnitud del desastre: Julio narra aquello como una “desolación, un sitio arrasado y mucha gente necesitada”. Por su parte, Ángel y Javier confirman que ya están organizando una nueva expedición. “Estamos en contacto con gente de allí y es probable que vayamos, en esta ocasión a realizar tareas más específicas y técnicas”, comenta Javier.

stats