El Recreativo cae goleado en Córdoba (3-0)

Córdoba/El Recreativo Granada sigue sin ganar lejos de su feudo y ayer cayó en el Nuevo Arcángel por 3-0 ante un Córdoba CF merecedor de los tres puntos.

Y es que los locales fueron dominadores absolutos del encuentro, tuvieron el balón desde el inicio y ocasiones de sobras, tanto, que Pol Tristán acabó siendo el mejor de los suyos pese a encajar tres goles. Mientras, el filial nazarí apenas pisó el área contraria y solo en la recta final de la primera mitad generó algo de peligro, así como un remate aislado en el minuto 82, con el partido ya decidido.

Salió mejor el Córdoba CF, que se hizo dueño del balón y desde el inicio trató de moverlo con velocidad para abrir huecos en la zaga visitante. Llegaba así muy pronto la primera ocasión clara de los locales, cuando apenas se cumplía el minuto 4, en un centro lateral de Carracedo que Casas remataba fuera por muy poco.

Los locales tenían el balón ante un recreativo Granada que se mostraba mucho mas conservador pero que, poco a poco, conseguía frenar el ritmo del partido. Sin embargo, no jugó eso a su favor, el equipo local tocaba y tocaba hasta abrir hueco y plantarse en la frontal del área, donde Carlos Albarrán conseguía rematar y enviar el balón al fondo de las mallas pese a la estirada de Pol Tristán, que llegó a tocar el balón.

No reaccionaba el filial nazarí tras el gol en contra. Los de Juan Antonio Milla intentaban avanzar metros y arrebatarle el balón al contrario, pero el Córdoba CF, muy seguro, apenas le daba opciones a un recreativo Granada nervioso, que se precipitaba y acababa perdiendo el balón muy rápido.

Eso sí, los granadinos mantenían el orden atrás y pese a que el Córdoba CF merodeaban una y otra vez el área de Tristán, las ocasiones claras brillaban por su ausencia, al menos hasta el minuto 67, cuando Carracedo probaba desde la derecha con un centro lateral que a punto estuvo de colar en su propia puerta un defensor visitante.

Solo en la recta final de la primera mitad consiguieron los de Milla generar peligro, primero en un error en la entrega de Albarrán que recogió Pablo Sáenz, pero su remate se fue directamente fuera, y en el 42, en un potente remate de Clavijo que despejó in extremis el meta local enviando el balón al palo.

Justo antes le habían anulado un gol a los locales después de que casas se ayudase con la mano para robarle el balón a Tristán. No fue la última acción de peligro de la primera parte y el 2-0 pudo llegar en el 45, en una jugada a balón parado que remataba Kike Márquez con un potente disparo desde la frontal que obligaba a lucirse a Pol Tristán.

El empuje y las ocasiones del Recreativo Granada volvieron a desaparecer en el inicio de la segunda mitad. El Córdoba CF volvía a ser dueño absoluto del balón y trataba de poner cerco a la meta contraria. No tardó en esta ocasión el equipo local en encontrar premio y en el minuto 53 Kike Márquez aprovechaba una jugada embarullada en el área para meter el pie y forzar la intervención de Pol Tristán, que llegó a tocar el balón pero no pudo sacarlo y lo acabó introduciendo en su propia puerta, aunque finalmente el gol fue concedido a Kike Márquez.

Más partido

Movía el banquillo Juan Antonio Milla en busca de un revulsivo que devolviese a los suyos al partido, pero la entrada de Juanma, Mario González y Griger apenas hizo cambiar la dinámica del partido y el Córdoba seguía teniendo el balón y acercándose con peligro a la meta nazarí, como en el minuto 64, cuando Tristán volvía a salvar a los suyos ante un disparo de Simo.

No reaccionaban los visitantes, y en el 73 llegaba el gol que dejaba el encuentro prácticamente sentenciado en un saque de esquina que remataba de cabeza Alberto Toril, que acababa de saltar al terreno de juego, al fondo de las mallas.

Pese a todo, el recreativo Granada siguió intentando sacudirse de encima al rival y buscar la portería de Carlos Marín, y pudo llegar el gol en el 82, en un remate de Carlos Pérez que se iba fuera por muy poco.

Tampoco los locales se conformaban con el 3-0 y la replica no tardó en llegar, Diarra probaba suerte en el 86 con un disparo seco desde la frontal del área que se estrellaba en el palo.

Siguieron intentándolo locales y visitantes hasta el pitido final, aunque con poco convencimiento ya y aún menos peligro, por lo que ya no hubo mas sorpresas.