Descansados se rinde mejor

Lo habitual en el Granada CF esta campaña, diferente a todas las anteriores por el hecho de jugar por primera vez en su historia competición europea, es cambiar a una media de tres o cuatro futbolistas de un partido a otro cuando ha tenido que afrontar encuentros entre semana, que ha sido siempre desde que comenzó el curso salvo en los parones de selecciones.

Los demasiados lesionados que ha habido desde que se inició el curso ha impedido que el número de rotaciones pudiera ser mayor. Esta jornada en Elche, sin embargo, fue diferente.

La mala racha arrastrada por el equipo en LaLiga Santander y el hecho de tener ya asegurado el paso para la siguiente ronda de la Liga Europa llevó a Diego Martínez a reservar a muchos de sus jugadores más importantes el pasado jueves en Grecia.

Esto provocó que ante el Elche sólo repitieran en el once tres futbolistas que también actuaron de inicio en Salónica: Nehuén Pérez, Foulquier y Luis Milla.

Dibujo habitual

Tras afrontar la anterior salida, ante el Celta, con una defensa de tres centrales y dos carrileros, y optar por un 1-4-2-3-1 en la Liga Europa ante el PAOK, el Granada recuperó el Elche su dibujo más habitual este curso, el 1-4-1-4-1, con Luis Suárez escorado de salida a la banda izquierda y la gran novedad de Nehuén en el centro de la zaga junto a Domingos al estar Vallejo lesionado y Germán sancionado.

Tras varios partidos del campeonato doméstico en los que no se veía desde el inicio a un Granada que mandara y gobernara los choques, fue capaz de volver a hacerlo en Elche.

El conjunto de Jorge Almirón tuvo muchos problemas para frenar las embestidas de los rojiblancos, con Machís y Luis Suárez mostrándose muy verticales y pisando área con asiduidad, y los dos interiores, tanto Luis Milla como Yangel Herrera, mostrando su mucho recorrido y atacando el espacio con regularidad.

Entre los cuatro generaron la mayoría de acciones peligrosas del Granada en un primer tiempo notable de los rojiblancos, pese a que el Elche creó cierta incertidumbre en un par de acciones a balón parado.

Diego Martínez, que en los últimos encuentros se había visto obligado a realizar sustituciones en el descanso, no tocó esta vez nada en el intermedio tras una primera parte que seguro hubiera firmado antes del choque.

El Elche, para intentar generar algo más con el balón, sí que realizó dos cambios en el intermedio.

Más tarde que nunca

Transcurrió por unos derroteros tan buenos el partido para el Granada, también en la segunda parte pese a que el Elche tuvo más posesión que en la primera, que Diego no movió su banquillo hasta el minuto 75, algo totalmente inhabitual en un preparador bastante intervencionista y que suele hacer las sustituciones mucho antes.

En detalles como este se vio la enorme diferencia en lo físico que mostró el Granada en Elche, con jugadores descansados y sin fatiga, en relación a los anteriores encuentros, en los que el cansancio ni siquiera le permitió acercarse a su mejor versión.

La entrada en el tramo final de Puertas, Jorge Molina, Yan Eteki y Quini sirvió para meter un poco de oxígeno, para acabar con doble lateral en la banda izquierda, al estar Quini de extremo muy pendiente de Barragán, y para arropar un poco más a la gran pareja que formaron Domingos y Nehuén.