El Granada CF sigue con su idilio en Los Cármenes tras imponerse al Cartagena (1-0)

Granada/El Granada CF sigue con su idilio en Los Cármenes. Los rojiblancos, con un nuevo tanto de Uzuni, esta vez de penalti, se impusieron por la mínima a un Cartagena que opuso mucha resistencia y que, en la segunda mitad, dio un paso adelante en busca de un empate que finalmente no logró. Los granadinistas se meten de lleno en la pugna por los dos primeros puestos y siguen invictos en casa.

Paco López decidió ‘hacer un Karanka’ y jugar sin la referencia ofensiva de Jorge Molina en punta de lanza. El valenciano buscaba tener más posesión con Melendo y Rochina ayudando a Petrovic en la creación. Pero el plan le duró cuatro minutos, que fueron los que duró Rochina sobre el terreno de juego, lesionado tras hacerse año en la rodilla al caerle el peso de un rival en su articulación. Entró Bodiger y aunque el dominio fue siempre rojiblanco, faltó concretar.

Dominio local

Enfrente tenía a un atrevido Cartagena que jugó con tres centrales y dos carrileros muy abiertos. Sin embargo, las mejores ocasiones fueron locales. La mejor llegó en el 14’ tras un centro de Melendo que remató Callejón de volea, pero el exrojiblanco Aarón se encontró con el balón evitando el 1-0. Dos minutos después, Ricard lo intentó desde fuera del área pero su chut raso lo detuvo de nuevo Aarón. Fue la mejor fase de un equipo al que le costó coger el ritmo ante tanto parón. Entre las pérdidas de tiempo, la lesión de Rochina y la posterior de Musto, hubo poca continuidad.

Los murcianos trataban de hacer daño a la contra guiados por un incombustible Mikel Rico, por el que parece que no pasan los años. Jairo y Feuillassier trataron de buscar la espalda de los laterales de una zaga que se mostró muy firme con la novedad de Cabaco. Cuando Soro y Melendo entraron en juego, la fluidez mejoró pero ambos jugadores deben intentar el disparo mucho más de la frontal pues, en varias ocasiones, quisieron llegar al arco rival a base de tocar cuando no siempre se puede.

Gran parada

Callejón se entendió bien con Neva y Melendo le dejó todo el carril diestro a Ricard, pero Uzuni arriba apenas tuvo opciones de remate. En el juego directo, Alcalá y otro ex como Pablo Vázquez se impusieron siempre. Y así fueron transcurriendo los minutos sin que apenas pasara nada hasta que Feuillassier, en una acción en la que se reclamó mano previa, puso a prueba a Raúl Fernández tras una internada en el área que el guardameta vasco solventó con una gran parada. Fue la mejor acción ofensiva de los murcianos, que estuvieron apoyados en las gradas del Nuevo Los Cármenes por unos 650 fieles.

Paradón de Aarón

La reacción de los de Paco López llegó por medio de un disparo desde la frontal de Soro que detuvo sin problemas Aarón, que tuvo tiempo antes del descanso de volver a ser protagonista evitando el 1-0 con un remate de cabeza de Petrovic a saque de esquina que sacó con otra gran intervención. El valenciano se reivindicó ante la que fue su afición permitiendo que los de Carrión se fueran al receso con un punto en su haber.

El segundo acto arrancó con un Cartagena más atrevido con la entrada de David Ferreiro al campo. Callejón lo intentó de todas las formas, de falta, desde la frontal...aprovechando el gran trabajo de Neva, incansable por su banda. Poco a poco, los rojiblancos fueron encerrando a su rival pero sin gozar de claras ocasiones de gol.

De nuevo Uzuni

Pero el no crear oportunidades hizo que los murcianos dieran un paso adelante ante un equipo que necesitaba aire fresco. El choque entró en una fase insulsa en el que ninguno de los dos entrenadores quiso arriesgar. Hasta que en el 70’, en una acción aislada, Soro cayó en el área derribado por Iván Calero. Busquets Ferrer decretó la pena máxima que ejecutó, una vez más, Myrto Uzuni (70’).

Se hizo lo más difícil cuando Paco López ya preparaba dos cambios que se quedaron en uno con la entrada de Antonio Puertas por Soro. Restaban veinte minutos más el descuento y el cuadro departamental se fue arriba descaradamente. No le queda otra. Ortuño, a once del final, obligó a Raúl Fernández a realizar una gran parada. A ello se unió la expulsión por doble amonestación de Bodiger en el 81’.

La incertidumbre se instaló en Los Cármenes. Sangalli puso a prueba de nuevo a Raúl, que volvió a salvar a su equipo y dejar una nueva puerta a cero más. Sin embargo Alcalá, con una durísima entrada a Petrovic, vio el camino de los vestuarios antes de tiempo dejando igualdad numérica sobre el verde. Un respiro con la afición rojiblanca venida arriba que le dio fuerza a sus jugadores cuando más lo necesitaban. Uzuni, en el 93’ pudo dejar sentenciado el choque pero de nuevo Aarón repelió el chut para completar un gran encuentro. Fue el epílogo de una trabajada y sufrida victoria ante un rival, el murciano, que dará mucha guerra en la segunda vuelta.