El Levante asalta Los Cármenes y rompe la racha del Granada CF

Granada/El Granada CF no pudo mantener su racha y dio por concluida su serie de ocho partidos seguidos sin perder tras caer en el Estadio Nuevo Los Cármenes ante el Levante (1-2), que tuvo la pegada en la primera mitad que le faltó a los rojiblancos. Con este resultado no pueden completar un mes de octubre que estaba siendo inmaculado pues habían ganado todos sus duelos.

Con la principal novedad en el once del central del central del Recreativo, en dinámica del primer equipo, Oscar Naasei y cinco cambios más con respecto al conjunto que venció en Castellón, Fran Escribá completó la intensa semana de partidos con rotaciones.

El choque, en sus primeros diez minutos, estuvo muy igualado con ambas escuadras respetándose mucho, quizá en exceso, lo que hizo que ambos porteros vivieran tranquilos. Sólo tímidos acercamientos por ambas bandas gracias a las incorporaciones de Brau y Ricard, generaron algo de peligro ante el arco del exrojiblanco Andrés Fernández. Pero con el paso de los minutos, los granotas fueron dando pasos hacia adelante y, al cuarto de hora, Iván Romero con un remate al primer palo hizo trabajar por primera vez a Mariño.

La respuesta no tardó en llegar pues en la siguiente acción, un buen pase de Pablo Sáenz a Ricard terminó con un centro del lateral que Uzuni remató con la diestra, pero Andrés se estiró para despejar el cuero como pudo. Pareció animarse el choque y lo hizo tanto que llegó a romperse el empate. Un saque de esquina muy mal defendido por los locales, permitió a Kochorashvili recibir en el vértice del área y acomodarse el cuero a su pierna izquierda para batir por bajo a Diego Mariño (18’).

La grada, lejos de pitar a sus jugadores que no estaban cómodos sobre el césped, fue la de cantar y animar para tratar, cuanto antes, de revertir la situación. Tocaba remontar como ya sucediera en Castalia. Y la reacción fue buena. Los rojiblancos comenzaron a llegar con peligro, con disparos de Gonzalo Villar y llegadas por la derecha de Ricard pero sin tener la suficiente pegada. Incluso Tsitaishvili intentó el gol olímpico pero Andrés lo evitó con una buen estirada.

Fueron los mejores minutos de los de Escribá en el primer tiempo. Sin embargo, en una llegada aislada en el 31’, una gran pase de Morales a Pablo Martínez permitió a los de Julián Calero hacer el 0-2 tras un remate cruzado del centrocampista levantinista. Ese gol sí que fue un jarro de agua fría que nadie esperaba en una noche, la primera de la temporada, de por sí con pocos grados en la instalación del Zaidín.

Al Granada CF no le quedaba otra que tratar de recortar distancias y meterse en el partido antes del descanso. Y lo intentó, principalmente, por la derecha pero entre malos centros y remates tímidos y sin potencia como el de Gonzalo Villar de cabeza, el marcador no se movió. El Levante sabía que a la contra podía hacerle daño a su rival y con Morales, Carlos Álvarez y ambos laterales, trataron de sorprender y gozaron de alguna que otra llegada pero sin muchas consecuencias. Y con desventaja en el marcador de dos tantos se llegó al descanso con la sensación de que hincarle el diente a los valencianos no iba a ser fácil.

Desde el banquillo granadinista se movió ficha tras el paso por vestuarios y se quedó en el vestuario Tsitaishvili para dar entrada a Reinier, que actuó en la media punta con un rombo en el centro del campo y Villar tirado un tanto a banda. Pero la primera ocasión la tuvo el menudo Carlos Álvarez de cabeza a centro de Andrés García, empero su remate con la testa le llegó a Mariño a las manos pues le salió muy centrado.

Reinier tuvo la primera oportunidad fruto de una contra que culminó con un remate de cabeza a centro de Pablo Sáenz pero su intento no encontró portería. Fue la antesala del tanto rojiblanco que llegó cuando pocos lo esperaban. Un gran pase de Villar a Ricard lo tocó el catalán de cabeza para Reinier, cuyo duro fuerte disparo fue repelido por Andrés Fernández, pero el rechace tras seguir la jugada lo remató al fondo de las mallas el propio Ricard, llevando de nuevo la ilusión a las gradas.

Los de Escribá se animaron y pusieron cerco a su rival, al que le costó salir de su campo. Boyé, a centro de Villar, tuvo el empate con un remate de cabeza. Pero el Levante tuvo la sentencia en una contra tras una pérdida de Hongla en la que Morales habilitó a Iván Romero, que se plantó solo ante Mariño sin embargo, el gallego le ganó en el uno contra uno dejando vivo a su equipo. Entraron Rubén Sánchez y Manu Trigueros al terreno de juego por Ricard y Gonzalo Villar. Se buscaba ese último pase para igualar la contienda que no llegó. El duelo era claramente dominado por los rojiblancos que lo intentaron por todos los medios. Por momentos sometieron a los de Calero pero no terminó de llegar ese tanto que le permitiera empatar la contienda. El Levante se echó atrás pero supo defender su renta para volver a dejar al Granada CF sin tres puntos que le hubieran permitido ocupar una de las dos plazas de ascenso directo. Se rompió la racha.