El límite salarial evidencia que el Granada se lo juega todo a ascender este año

El Granada CF ha alcanzado, al cierre del mercado de fichajes de este verano, el límite salarial para el coste de la plantilla más bajo de los últimos años, lo que puede llegar a generar serias dudas sobre la situación a largo plazo del club en caso de que no logren ascender, sea como sea, a finales de la presente temporada. Esta situación está condicionada a posibles movimientos que mejoren estos números o a la evolución deportiva del equipo.

De acuerdo con los datos proporcionados por LaLiga, el tope salarial del club rojiblanco en esta ventana de fichajes ha sido de 6,95 millones de euros. Esta cifra es diez veces menor que la alcanzada en el cierre del mercado de invierno de la temporada pasada a la que los rojiblancos llegaron como recién ascendidos y campeones de Segunda División, lo que le permitió alcanzar límites históricos que pasaban la barrera de los 60 millones de euros en el mercado de invierno, aunque en verano fueron 47.

Esta cifra indica que el Granada CF ha mantenido gran parte de su plantilla del curso anterior con salarios que apenas se han reducido, y es que los rojiblancos se han quitado masa salarial pero los pesos pesados, que evidentemente tienen mejores sueldos, continuan en el club. Aunque ha logrado inscribir a todos los jugadores que tenía previstos y no se han apreciado problemas económicos durante el mercado (el Granada ha podido realizar todos los fichajes que la dirección deportiva ha estimado oportunos) esta situación limita el futuro inmediato del club y puede significar un problema más a largo plazo que a corto.

La estabilidad financiera del Granada CF dependerá de un aumento en los ingresos y de la reducción de los gastos, un reto que debe afrontarse antes de que termine la temporada. Aunque la cosa se podrá poner realmente fea si no se consigue el ansiado ascenso a final de temporada. El club se verá obligado a aplicar una política de recortes muy estricta para la próxima campaña, y lo deportivo no anima ser excesivamente optimista. El equipo suma un punto de nueve en casa y cuatro de doce en general, ha firmado su peor estreno como local en toda su historia en Segunda División y las voces en contra de la dirección del club no cesan ni parece que vayan a hacerlo. Por si no fuera poco ya son muchos los granadinistas que no acaban de congeniar con el sistema de Guillermo Abascal, sus decisiones o sus planteamientos tácticos. Un cóctel que puede explotar antes de lo deseado. Todo esto dificulta aun más que algunos jugadores se revaloricen de cara a una posible venta o que el límite salarial aumente, por lo que los rojiblancos se lo juegan todo a una carta, la del ascenso.

Con respecto a los otros dos equipos descendidos junto al Granada, el único que se salva de esta amplia reducción es el Cádiz CF. El equipo de Paco López, que viene de conseguir su primera victoria tras ganarle al Castellón por 1-3 el pasado lunes, lidera la tabla con el mayor margen de la categoría. Tras el descenso, el Cádiz ha pasado de 49,48 millones el curso pasado en Primera División a esos 18,84 que tiene como máximo para invertir en los salarios de todos los jugadores del primer equipo y el cuerpo técnico.

Una de las sorpresas es la presencia de la UD Almería en los puestos más bajos del ranking, y es que el equipo indálico aparece como el segundo con menos capacidad económica, con 3.594.000 €, sólo por encima de la SD Huesca. El enorme valor de plantilla y el mantenimiento de todos sus grandes jugadores, como Lopy, Arribas, Robertone, etc, a los que hay que añadir a Nico Melamed, ha dejado a los almerienses sin mucho margen de maniobra. Eso sí, mejorarán su situación antes de invierno porque además de los ingresos por traspasos, los ingresos por patrocinio también son cruciales. En los próximos días, el club tiene previsto anunciar un nuevo patrocinador principal para el primer equipo, lo que aportará una suma considerable y permitirá mejorar su posición en el ranking publicado este pasado jueves. A esto se suma el acuerdo pendiente para el ‘Naming Partner’ del estadio, que aún no se ha concretado, y es que el tradicional Juegos del Mediterráneo tendrá otro nombre.