El Granada CF rompe su racha sin ganar y vence al Mirandés por la mínima

Granada/El Granada CF rompió su racha de cinco partidos sin ganar tras derrotar por la mínima al Mirandés (0-1) en un duelo en el que se adelantó pasado el cuarto de hora, renta que supo defender dejando por segunda jornada en la temporada su portería a cero. Los rojiblancos se encuentran invictos a domicilio y han cambiado radicalmente su imagen en las dos últimas fechas de calendario.

Con Shon Weissman como única novedad en el once inicial en relación al equipo que empató en Burgos la pasada jornada, Fran Escribá dejó en el banquillo al brasileño Reinier para apostar por el israelí en punta de lanza. Los rojiblancos salieron al terreno de juego con el objetivo de cometer los menores errores posibles en el pase cuando tenían el cuero, pero sin arriesgar en exceso. Eso provocó que en los primeros minutos, apenas se acercaran al área del ex Raúl Fernández.

De hecho, el primer acercamiento llegó a los 12 minutos tras una prolongada jugada de combinación que terminó con un centro de Tsitaishvili que no pudo rematar ni Weissman ni Józwiak. Hasta entonces, ninguno de los conjuntos puso en complicaciones a la zaga rival. A los jabatos, muy ordenados, no les importaba replegarse defensivamente con todos sus hombres en su terreno de juego.

Gol rojiblanco

En una de las pocas contras que tuvo el cuadro de Lisci, en el minuto 16 se reclamó una mano en el área de Ricard que Muresan Muresan, el colegiado valenciano, no estimó y que pareció clara pero que vino precedida de un rebote de su propia pierna, lo que anulaba la infracción. Recuperó el cuadro rojiblanco y una contra montada por Brau y Józwiak, terminó con un centro del extremo polaco que remató Shon Weissman en el corazón del área quien, por fin, volvió a marcar en partido oficial tras su debut ante el filial del Villarreal el pasado 5 de febrero de 2023. Nada menos que 608 días sin ver puerta en un partido de liga. Casi nada.

Respondió pronto el Mirandés, que puso a prueba a Mariño con un remate de Reina en el segundo palo que le salió demasiado flojo, atajando el guardameta gallego sin problemas. Los de Escribá hicieron lo más difícil, que era batir al equipo menos goleado de Segunda División. El dominio de la medular y el equilibrio que tanto exige el técnico valenciano bastó para no pasar apuros. Incluso Ricard, tras un rechace fruto de un saque de esquina, pudo hacer el 0-2 pero su disparo desde la frontal se marchó por encima del larguero.

Buen Mariño

El peligro del cuadro de Miranda de Ebro llegó por medio de las acciones a balón parado. Con 0-1, el Granada CF mostró la imagen de equipo trabajado que tanto se echaba en falta en la etapa de Guillermo Abascal. No tuvo en el primer tiempo muchas más ocasiones de gol, pero vivió relativamente tranquilo. Tan sólo un chut desde la frontal de Gorrotxa que se fue alto y, sobre todo, un duro disparo de Joel Roca tras una pérdida de Weissman que obligó a Mariño a emplearse a fondo para evitar el empate, fueron las oportunidades más claras de los burgaleses. Lo peor del primer tiempo fueron las tres amarillas que vieron Loïc Williams, Ignasi Miquel y Ricard que condicionó mucho a la línea defensiva para el segundo periodo.

La tuvo Uzuni

En el primero minuto de la reanudación, una recuperación de Gonzalo Villar dejó solo a Uzuni ante Raúl Fernández, pero el albanés cruzó demasiado con la zurda. Era el primer minuto y los de Escribá enviaron un mensaje de que no se iban a encerrar en exceso aunque finalmente no fue así y lo pasaron mal. Hugo Rincón, con un centro-chut, obligó a Mariño a enviar a córner en la primera acción peligrosa de los castellano-leoneses.

Poco a poco, el Mirandés fue apretando más arriba, costándole a los rojiblancos ya no solo generar peligro sino pasar del centro del campo, aunque se mostraron muy serios a nivel defensivo. Faltaba tener más el balón y desde el banquillo se movió ficha. Salieron del terreno de juego Józwiak y Weissman para dar entrada a Manu Trigueros y Lucas Boyé, que volvió así tras su lesión en las costillas. El ex del Villarreal partió desde la banda izquierda como en la etapa de Abascal, aunque se metió por dentro cuando atacaba su equipo. Arriba, Uzuni acompañó al argentino.

Sufrimiento

Izeta, en el 69’ tras una pérdida del delantero albanés, tuvo el 1-1 pero detuvo el portero granadinista. El choque pasó a ser dominado por los locales y Panichelli, de volea solo en el segundo palo, pudo igualar la contienda pero mandó el cuero fuera. Una clara ocasión y un serio aviso pues el Granada CF comenzó a sufrir de lo lindo. Restaba un cuarto de hora para el final más el descuento y el Mirandés no cesó en su empeño. Sabe hacer cuatro cosas pero las hace muy bien.

Los locales merecieron el empate pero Panichelli, a cinco del final, se encontró con un gran Mariño que sacó una mano providencial tras un duro remate del ariete jabato. Era el momento de sufrir y se hizo. El equipo tiró de oficio y supo sacar tres puntos muy importantes. Cuatro de seis en dos salidas consecutivas que los rojiblancos deben hacer bueno el próximo fin de semana ante el Córdoba. La imagen ya es otra.