El Granada CF domina pero vuelve a carecer de pegada ante la Ponferradina

Granada/El Granada CF no perdió. Pero tampoco ganó. Los rojiblancos dominaron, jugaron mucho tiempo en campo contrario, minimizaron los puntos fuertes de la Ponferradina pero volvió a carecer de pegada. En los últimos seis duelos ha marcado dos tantos, ambos en el mismo partido. O lo que es lo mismo, en cinco de esos seis encuentros no vio puerta. Además, es la cuarta salida sin perforar el arco rival y así es imposible ganar.

Aitor Karanka volvió a hacer cambios en el once. Hasta cinco modificaciones realizó en una alineación en la que sorprendió la ausencia de Uzuni y la entrada de un ‘9’ referencia como Jorge Molina. Antonio Puertas, en la derecha, y Callejón en la izquierda ocuparon las bandas, con Melendo en la media punta. Petrovic volvió a acompañar a Bodiger en el centro del campo y Miguel Rubio regresó al eje de la zaga junto a Víctor Díaz.

Presión alta

Con esos efectivos, el técnico vasco ordenó a sus jugadores presionar la salida del balón del cuadro de El Bierzo. Una presión alta que trató de impedir que los de José Gomes salieran con comodidad y que permitió robar el cuero en zonas peligrosas. Con balón, la participación de Melendo fue fundamental para tener continuidad en línea de tres cuartos. El ex del Espanyol se sintió cómodo, tuvo mucha participación además de libertad de movimientos. La posesión durante la primera mitad fue rojiblanca. Un dominio que se fue concretando con llegadas al área local.

El problema

Sin embargo, cuando la Ponferradina lograba salir con claridad de la presión de los de Karanka tenía muchos metros para llegar a las inmediaciones de Raúl Fernández. Demasiado espacio para pensar que afortunadamente en el primer acto no supo aprovechar. Quedaba por ver si ese ritmo se podía mantener los 90 minutos. Las subidas de Ricard Sánchez fueron constantes y ello provocó contar con muchos efectivos en la zona de definición.

El nueve

Muchas han sido las ocasiones en estas nueve jornadas en las que se le ha solicitado al técnico vasco jugar con un ‘9’ referencia. En Ponferrada empleó a Jorge Molina y el alicantino no decepcionó. Aportó mucho, fue un peligro constante, de espaldas volvió a demostrar que es todo un maestro y, encima, jugó mucho en el área por el dominio de balón de su equipo. Y es que cuando los ‘ataques de entrenador’ se dejan a un lado y se pone en liza un once lógico, todo es más fácil y la fluidez surge de manera natural.

Lesión

El arranque de la segunda mitad presentó la novedad de la salida del terreno de juego de Ricard. El lateral diestro sufrió un golpe antes del descanso y se terminó quedando en el vestuario. Karanka ordenó la entrada de Rochina, lo que hizo que Antonio Puertas actuara de lateral diestro. Otro jugador más para asociarse partiendo de banda.

Arsenal

Sobre el campo se encontraban Callejón, Rochina, Melendo y Jorge Molina mientras que Uzuni esperaba su oportunidad en el banquillo. Pero todo ese arsenal ofensivo no se tradujo en excesivas ocasiones de gol. Fue Rochina el que tuvo dos opciones en el inicio pero optó por disparar, sobre todo en el 50’, con Bodiger y Molina esperando el pase del valenciano.

Sin Molina

Poco más de una hora duró el Granada CF con un delantero centro en el campo. Karanka dio entrada a Uzuni en detrimento de Jorge Molina. Callejón ocupó su puesto en punta de lanza con el albanés en la izquierda. Restaba media hora y Melendo bajó sus prestaciones. La presión no era como la de la primera mitad y la ‘Ponfe’ se fue soltando en ataque, gozando de varios saques de esquina, uno de sus puntos fuertes.

Con Arezo

Desde el banquillo se quiso refrescar la zona atacante. Bryan Zaragoza y Arezo ingresaron en el verde por Melendo y Callejón. El canterano se situó en la derecha, pasando Rochina a la media punta, con Arezo por delante. Se volvió a actuar con un ariete puro. El uruguayo a punto estuvo de abrir el marcador tras centro de Bryan pero Amo evitó que el primero rematase.

Partidos

El choque fue abriéndose cada vez más. Un ida y vuelta que no beneficiaba a los rojiblancos pues cada vez les costaba más volver. Las distancias entre las líneas cada vez eran mayores y eso lo aprovecharon los castellano-leoneses. Pero el cansancio fue apareciendo en ambos contendientes. Cordero Vega anuló un tanto a Miguel Rubio por manos tras una falta lateral en el 84’. Bryan hizo mucho daño a la zaga local. Unos últimos arreones que no sirvieron para marcar. Son cuatro salidas sin anotar. Algo se está haciendo mal.