El Granada CF vuelve a sonreír a domicilio

Granada/Un total de 462 días han tenido que transcurrir para que el Granada CF vuelva a ganar fuera de casa. El conjunto de Guillermo Abascal logró sus tres primeros puntos de la temporada en Segunda División tras imponerse por 0-1 al Racing de Ferrol, que opuso mucha resistencia en la primera mitad y no tanto en la segunda. Ricard Sánchez rompió la sequía a domicilio y ya se respira otro aire en el entorno del club granadino.

El técnico sevillano realizó hasta tres modificaciones con respecto al once que cayó en Los Cármenes frente al Albacete. La entrada de Luca Zidane estaba cantada. También salió de inicio Manu Trigueros, que lo hizo por Józwiak, mientras que la gran sorpresa fue mantener a Weissman en el equipo y sentar en el banquillo a Myrto Uzuni para dar entrada a Lucas Boyé. Esto hizo que Trigueros, en defensa, ocupara la zona izquierda pero en ataque jugó por dentro ayudando en la creación, dejando así el carril zurdo para Neva haciendo la cobertura Hongla.

Duelo intenso

El choque, en su primera mitad, fue de ida y vuelta. Un ritmo alto que provocó que a algunos jugadores rojiblancos se les vieran las carencias físicas a esta altura de temporada. Arrancó con decisión el conjunto de Guillermo Abascal con un centro de Carlos Neva que detuvo Jesus Ruiz en el primer minuto de partido. Los locales, con una presión alta, incomodaron a los rojiblancos y en un error de Hongla se pudieron poner por delante. Sin embargo, el centro de Chiki Borrego lo despejó el propio centrocampista camerunés a saque de esquina.

El duelo era muy atractivo para los espectadores pero no tanto para los visitantes, que por momentos sufrieron defensivamente. Al cuarto de hora, un despeje de Neva tras un centro desde la izquierda y un error en la salida de balón que no aprovechó Luis Perea, llevo el ‘uy’ a la grada. Pero la respuesta llegó por parte de Shon Weissman en el 19’ con un remate en el área que detuvo Jesús Ruiz.

La mejor ocasión

Sin duda, era un partido entretenido aunque la mejor ocasión del choque llegó antes de la media hora con un disparo de Manu Trigueros, que no participó en exceso en el juego, pero que cuando lo hizo generó peligro. El ex del Villarreal disparó con la izquierda desde la frontal pero su chut lo despejó a córner el guardameta del cuadro gallego.

El ritmo alto y las alternativas provocaron que a varios jugadores les costara volver a su posición, demostrando que no están en su mejor momento de forma. Aunque lo peor del primer acto fueron las numerosas imprecisiones en las entregas que generaron más de un susto. Una de ellas, de Manu Trigueros, llegó a diez minutos del receso. Su mal pase lo aprovechó Álvaro Giménez quien, desde el centro del campo, intentó sorprender a Luca Zidane pero su disparo se marchó por encima del larguero. Errores no forzados que había que corregir. La última acción del primer tiempo llegó con un remate de cabeza de Lucas Boyé a centro de Sergio Ruiz en el minuto 42 que no encontró portería.

Había mucho que mejorar, sobre todo en lo que se refiere a controlar el tempo del partido y tratar de evitar las contras del rival. Sin cambios arrancó el segundo acto en el que estaba por ver si el ritmo iba a ser el mismo estando aún en el mes de agosto. Y lo cierto es que bajó. Fue el Granada CF el que tuvo más la posesión aunque sin ocasiones claras.

Paradón de Zidane

El equipo entrenado por Cristóbal Parralo no tuvo esa chispa del primer tiempo en ataque aunque no renunció a llegar al área de Zidane, hasta que un centro desde la derecha obligó al portero granadinista a salvar a los rojiblancos tras un remate de cabeza de Luis Perea. En el banquillo se movió ficha y Abascal dio entrada a Gonzalo Villar por Sergio Ruiz, que tenía amarilla.

Y en su primera acción, el murciano cedió a Trigueros quien, con un pase marca de la casa, dejó solo a Lucas Boyé que remató con la derecha, pero Jesús Ruiz respondió con una gran parada. Los locales hicieron un triple cambio de una tacada ante el mayor dominio del Granada CF y, posteriormente, un tercero por lesión de Brais. La respuesta fue la entrada de Uzuni y Pablo Sáenz por Weissman y Tsitaishvili.

Villar, vital

El choque fue muy distinto en la reanudación pues la entrada de Villar le dio otro aire al juego visitante. Sin embargo, con el paso de los minutos las ocasiones brillaron por su ausencia. Hasta que a ocho minutos del final, una contra montada con Uzuni y Neva terminó con un remate de Pablo Sáenz con todo a su favor pero Jesús Ruiz realizó una gran parada. El rechace le llegó al propio canterano que cedió a Ricard que batió por bajo al portero local.

Con ventaja en el marcador, y tras el descenso físico del Racing de Ferrol, Abascal dio entrada a Ignasi Miquel formando una línea de cinco atrás, con tres centrales y Uzuni de referencia. Era el momento de tirar de oficio y así se hizo. Se jugó poco para mantener una renta muy valiosa de cara a los dos próximos encuentros en casa que deberán afrontar de manera consecutiva ante el Huesca y el Deportivo. Ya llueve menos en el Granada CF.