Ricard celebra su tanto ante el Levante.
Ricard celebra su tanto ante el Levante. / Antonio L. Juárez / PHOTOGRAPHERSSPORTS

Granada/Cuestionado en muchas ocasiones por sus problemas a la hora de defender, Ricard Sánchez es el único futbolista del Granada CF que ha participado en todos los encuentros que, hasta el momento, ha disputado su equipo tanto en liga como en Copa del Rey. El catalán, un fijo para Guillermo Abascal en el inicio del curso y también para Fran Escribá, no parece tener competencia a día de hoy pese a que uno de los fichajes de Matteo Tognozzi fue Rubén Sánchez, que no termina de contar con la confianza del técnico valenciano entre lesiones y sanciones.

Sea en defensa de cuatro o como carrilero cuando se ha optado por jugar con una zaga impar con ambos entrenadores, Ricard está cumpliendo su tercera campaña como rojiblanco, siendo una pieza esencial sobre todo cuando de sorprender al rival con sus incorporaciones al ataque se trata. Y sus números a nivel ofensivo así lo muestran. Al margen de la gran cantidad de centros al área que suele realizar, no siempre rematados por sus compañeros y que han provocado en duelos anteriores que sea criticado por la grada, es el lateral más determinante a nivel ofensivo de la categoría tras la disputa de las dieciséis primeras jornadas.

Hasta el momento, ha disputado un total de 17 encuentros, dieciséis de ellos como titular (15 en la competición de Segunda División y uno en Copa) para un total de 1.390 minutos en juego. De ellos ha completado los 90 minutos en doce ocasiones, en cuatro fue cambiado pero jugando, como mínimo, 67 minutos, siendo tan sólo suplente en un encuentro, el disputado por los rojiblancos en Castellón en el que Rubén tuvo su oportunidad.

Estos guarismos le han permitido dar dos asistencias y anotar otros dos tantos. Dio pases de gol frente al Tenerife y el Eldense y en ambas ocasiones el beneficiado fue el mismo compañero, Lucas Boyé. Además, participó activamente en el 1-2 frente al Burgos en la séptima fecha del calendario en una internada por la derecha que terminó con un centró al área que tocó un defensor rival y culminó Manu Trigueros.

En cuanto a los goles, le dio los tres puntos a su equipo en la primera victoria del curso al anotar en la recta final en el duelo ante el Racing de Ferrol tras un pase de Pablo Sáenz. Su segundo tanto sirvió de poco pues fue el 1-2 ante el Levante al aprovechar un rechace del exguardameta del Granada CF Andrés Fernández a disparo de Reinier Jesús. Sin embargo, pese haber jugado ya 85 choques con la elástica rojiblanca, no siempre ha tenido el cariño de toda la grada del Estadio Nuevo Los Cármenes.

Amante de las redes sociales en las que es muy activo, para algunos de más, se siente como en casa y, de hecho, va a abrir un negocio en la ciudad. Sin embargo, es uno de los que cumple contrato el próximo 30 de junio y, a día de hoy, no ha renovado su vinculación con la entidad presidida por Sophia Yang. Presente en numerosos actos del club, es muy cercano a los aficionados y no rehuye ninguna foto cuando se le solicita.

Sus detractores le acusan de ser blando defensivamente pero su aportación ofensiva no la tienen muchos laterales de Segunda División, aunque para los más clásicos del mundo del fútbol lo primero que le piden es que defienda antes que ataque, pese a que los entrenadores que ha tenido en Granada siempre han contado con él por su capacidad atacante y desgaste físico.

En las tres campañas que lleva en el cuadro granadino ha contado como compañeros a Quini, Pepe, Manafá, Bruno Méndez y Rubén Sánchez y ninguno le ha quitado la titularidad de manera regular. Ello le llevó a ser internacional con la Selección española sub 21 en el curso 2022-2023 debutando ante Rumanía tras entrar desde el banquillo. Sin duda, un día que no olvidará aunque ya había sido internacional con la sub 19 en nueve ocasiones.

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