Variantes de un mismo dibujo en el Granada CF

Granada/El destituido Guille Abascal usó diferentes dibujos durante su etapa en el Granada, encabezonándose en uno con defensa de tres centrales y dos carrileros que fue su perdición porque insistió con él pese a que no le acompañaron ni las sensaciones ni los resultados.

Fran Escribá, mucho más experimentado y veterano que el sevillano, fue más a lo simple cuando llegó, colocando a los suyos en un 1-4-4-2 que es el esquema más utilizado a lo largo de su carrera.

Dejó claro en su presentación como nuevo entrenador del Granada que no se iba a cerrar a ningún dibujo y que elegiría en función de las características de sus jugadores, aunque todo el mundo tenía más o menos claro que de entrada iba a ir por lo básico y lo que más conoce.

No obstante, ese 1-4-4-2 que ha usado de forma inalterable de principio a fin en los dos partidos disputados, saldados con empate ante el Burgos (2-2) y con victoria contra el Mirandés (0-1), ha presentado ligeras modificaciones en diferentes momentos.

En la mayoría de los casos estas han tenido que ver con el jugador que ha ocupado la posición de segundo punta, ya que siempre ha estado clara tanto la línea de cuatro atrás como la media, con dos pivotes y dos jugadores de banda.

El esquema de Escribá presenta variación en función de si los dos jugadores elegidos para la punta son delanteros puntos o uno de ellos es más un centrocampista o un media punta.

Por ejemplo, contra el Mirandés en el último partido escogió la primera opción, con Uzuni y Weissman compartiendo la delantera de inicio. La apuesta le salió bien porque marcó el israelí el único gol del choque.

Ante el Burgos, sin embargo, ese segundo atacante era un jugador de características distintas. Primero fue Reinier y después Manu Trigueros, funcionando también el experimento porque marcó el Granada dos goles con ellos en el campo.

Precisamente contra el Mirandés optó por pasar de una versión a otra, ya que si los jugadores que empezaron el partido en punta fueron Uzuni y Weissman los que lo terminaron fueron Lucas Boyé y Manu Trigueros.

El técnico pierde para esta semana a Uzuni pero recupera del todo a Lucas Boyé, que ya reapareció en Miranda de Ebro y ahora tendrá una semana más de entrenos en el cuerpo, por lo que cuenta con opciones de ser titular.

Tendrá que elegir contra el Córdoba si usa al argentino junto a Weissman o si opta por una de los dos y la segunda plaza de delantero en el 1-4-4-2 es para Reinier, sin minutos ante el Mirandés, o Manu Trigueros.

El ex del Villarreal probó en Miranda durante algunos minutos partiendo desde banda, en la posición en que lo situaba Abascal, pero duró poco ahí y tras la entrada al campo de Pablo Sáenz se tiró al centro.