Antonio Córdoba: ''El arte salvó a la humanidad, ahora la humanidad debe salvar al arte''
Antonio Córdoba, artista plástico
Recuerdos del viento, su nueva exposición, presenta obras que muestran escenas familiares o cotidianas que brotan del artista para luego plasmar en ellas su tinte poético
El artista plástico Antonio Córdoba Fernández Antonio Córdoba Fernándezexpone en la Sala de Exposiciones del Centro Sociocultural Fernando de los Ríos hasta el 7 de agosto una retrospectiva de su obra Recuerdos del viento. Esta muestra tiene como hilo conductor el recuerdo y las experiencias vivenciales del artista, Recuerdos del viento es un viaje que explora el fenómeno de la percepción humana en el que Antonio Córdoba usa la sugerencia como el pilar central que sostiene su obra planteando perspectivas imposibles y composiciones arriesgadas que invitan al espectador a formar parte de la misma.
El título de esta colección responde a una selección muy cuidada de obras con una elevada carga emocional del artista. El dibujo adquiere un importante protagonismo y se busca la interacción entre el visitante, los recuerdos y la obra de arte. No es una exposición casual, aquí y ahora, sino que surge de la vinculación de Antonio Córdoba a Albolote ya que su Ayuntamiento fue uno de los primeros en apostar su creación pictórica a través de la tradicional exposición de artes plásticas de sus fiestas, el año 1998, por ello, el artista, con una amplia y reconocida trayectoria artística de más de 20 años ha querido volver a la Sala de Exposiciones del Centro Sociocultural Fernando de los Ríos para hacer balance a través de esta muestra. La cual acoge un total de sesenta obras inéditas del artista entre pinturas, grabados y dibujos, ejecutadas en distintas técnicas: óleos, acrílicos, aguafuertes, etc. entre las cuales destacan los grabados como su plato fuerte. Esos grabados llenos de enigmas y sugerencia, líneas cruzadas hasta llegar al negro puro aterciopelado, que provocan ese silencio del que hablamos y que manifiestan la gran belleza de esta técnica misteriosa y alquimista.
El artista
Antonio Córdoba, además de artista plástico, es licenciado enBellas Artes, graduado en Artes Aplicadas en la especialidad de Grabado, ha realizado diversos cursos de pintura y grabado, ha ejercido como docente y miembro de jurado, pertenece al colectivo de artistas INVER-ARTE (BB.AA), y en la actualidad estudia Arquitectura Superior en la E.T.S de la Universidad de Granada.
El artista granadino ha realizado numerosas exposiciones, tanto individuales como colectivas, algunas de las más recientes son: su exposición de pintura y grabado, Silencios Efímeros en el Palacio de Exposiciones y Congresos de Ronda (Málaga), en el año 2013 y de carácter individual. En ese mismo año realizó la exposición de pintura y grabado El maestro y sus discípulos en el Museo Casa de los Tiros y su exposición de dibujo Obra sobre papel en la Galería Cidi Hiaya, ambas exposiciones de carácter colectivo.
Córdoba posee colecciones albergadas por todo el mundo. Su arte reside en el Museo y Centro de Arte Contemporáneo Daniel Vazquez Diaz (Nerva-Huelva), en Museo de Arte Contemporáneo de la Zarzuela del Monte (Segovia), en el propio Ayuntamiento de Granada y en su Universidad, además de en otros ayuntamientos de localidades como Calicasas, Nigüelas o Albolote. En países como Roma, Alemania, Francia etc., entre otros lugares. Ha recibido numerosos galardones como el Primer Premio en el Concurso de Grabado de Nigüelas o el Premio de grabado en el XII Certamen de Artes Plásticas de Granada.
Orgulloso de amar y querer formar parte de la palabra arte
-¿Cuánto tiempo le ha llevado realizar esta muestra?
-Recuerdos del viento es una exposición retrospectiva que me propuso realizar el Ayuntamiento de Albolote hace tiempo, pero por motivos personales, y como no, la pandemia, la principal protagonista en los últimos años ha sido la que ha retrasado la muestra, hasta este año.
-¿Cuál era su objetivo con ella?
-He querido basarla en los recuerdos más íntimos y emocionales que un artista puede tener, creo que todas las exposiciones deberían ser así, porque una obra de arte debe emocionar y transmitir sentimientos, porque esa es la misión más bella que puede tener un creador. La palabra viento surge de las emociones más poéticas dentro de mí, porque el viento es lo que trae y lleva los recuerdos, en la exposición se puede ver los cuadernos de campo que siempre llevo en el bolsillo con anotaciones y garabatos, lo más íntimo, en esta exposición he querido ser más Antonio Córdoba que nunca, con técnicas tan puras y mágicas como el grabado, el dibujo, oleo, etc.
-La muestra contiene mucha carga emocional.
-He querido que la emoción sea la palabra protagonista, por la sencilla razón de que si una obra de arte ya sea pintura, dibujo, música, poesía, etc. no emociona no es arte, el arte nació con una única misión contar historias y emociones, la palabra arte es la palabra más pura de la historia del ser humano porque ya en los albores de la humanidad ya hacíamos arte sin saber que era arte.
-¿Qué obra destaca para usted si tuviera que elegir?
-La verdad que cada una de ellas tiene un trozo de mí, todas tienen un bonito recuerdo que me ha traído el viento, que difícil es esta pregunta pero qué bonita, porque en mi caso produce algo melancólico pero todo arte siempre tiene algo de melancolía, de decisiones, porque para exponer esta selección de obras he sufrido mucho, elegir unas pocas hojas de tu árbol, cuando necesitas tantas para poder vivir y respirar, pero hacer esa síntesis y que el árbol siga vivo, es muy difícil. Quizás por contestar algo y no evadir a su pregunta destacaría una serie de dibujos de gran formato de mis padres o de Elena la niña con sonrisa de viento. El dibujo es una técnica tan sublime, mágica, humilde y tan cercana, que hace que la forma de expresión sea la conversación que cualquier artista quiere tener con un soporte.
-Es usted un artista plástico con mucha profundidad, ¿de qué se siente más orgulloso profesionalmente?
-Me siento muy orgullo de ver como la luz escribe al viento haciendo que hoy sea artista, me siento orgulloso de nacer en una familia donde solo se regalaban lápices de colores porque no había otra cosa, y se contaban cuentos en una majestuosa catedral que un niño la hizo suya, me siento orgulloso de responder aquella pregunta que todos me hacían cuando era pequeño, “qué vas a ser de mayor, siempre contestaba; pintor, quiero ser pintor”, me siento orgulloso de amar y querer formar parte de la palabra arte, me siento orgulloso de trabajar tanto y que el solo el hecho de poder estar respondiendo esta pregunta sea un sueño, porque si, los sueños se cumplen, poder dedicarme a este oficio como me dijo el escritor Javier Sierra: “Antonio te has dedicado al oficio más noble del ser humano, crear”. Me siento orgulloso de no dejar de soñar y como nos decía el artista, mi amigo y maestro Carmelo Trenado siempre que terminaba sus clases en la Facultad de Bellas Artes, “soñad en color”.
-¿Qué es para usted el arte?
-Esta misma pregunta se la hago todos los años a mis alumnos de la Escuela de Arte, es la pregunta del millón, la respuesta es muy sencilla, ¿Por qué, donde se encuentra la belleza?, esta es la otra pregunta del millón, yo respondería, en la sencillez, hay algo más sencillo y bello que el arte, el arte es contar historias, es amar, es escribir un poema tomándote un café escuchando a Piazzola, es hacer de ladrón y robar un trozo del tiempo,... Expresar, esa es la respuesta a esta pregunta.
-¿Cree que los artistas plásticos reciben en España el apoyo y reconocimiento que merecen?
-Los médicos tienen el reconocimiento necesario, los trabajadores del campo tienen el reconocimiento necesario, o un albañil, etc. Reconocer si alguien o no está haciendo lo correcto y encima se lo merece, no depende de nosotros, depende de una sociedad que cada vez está difuminando más la magia, la magia de hacer felices a los demás, los artistas plásticos no salimos con pancartas a reivindicarnos en las calles, pero si tenemos el poder de contar a través de nuestra obra y que sea la mayor pancarta, porque será una reivindicación que durará durante siglos, la obra de arte es el reflejo de esta sociedad y del propio artista, el arte salvó a la humanidad ahora la humanidad debe salvar al arte, por eso se necesitan más exposiciones y que las administraciones apuesten más por la cultura, porque es la salvación de los artistas plásticos.
-¿Qué consejo le daría a los jóvenes artistas que comienzan su andadura?
-Que sueñen, que no dejen de soñar, que luchen por levantarse cada vez que se caigan. Ahora en mis clases les doy el secreto a mis alumnos de la Escuela de Arte, y siempre les digo, trabajo, trabajo y más trabajo ese es el secreto, no hay otro el artista nace pero se tiene que hacer.
-¿Con qué próximos proyectos nos sorprenderá?
-Un artista siempre tiene proyectos, tengo varios, entre ellos y el más próximo es la presentación de mi último poemario Mientras el viento duerme con más de cien poemas escritos entre Sevilla, Córdoba y Granada, se tenía que haber publicado en primavera, pero al final intentaré que sea este otoño. Como he comentado antes hay una disciplina muy mágica que es el dibujo, y me gustaría preparar una exposición solo con esta técnica, cosa que nunca he hecho, siempre he mezclado más técnicas en mis exposiciones, y me gustaría que fuese en el Museo Casa de los Tiros de Granada, ya que es un espacio que se adapta muy bien al proyecto expositivo que tengo en mente, pero mi mayor proyecto es seguir escribiendo y pintando todos los días hasta caer agotado, porque el pintor pinta para vivir y el artista vive para pintar.
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