Carmen Linares: ''Necesito el flamenco en mi vida''

Granada/Este año la XXI edición del ciclo Lorca y Granada estrena su función Jondo. Del primer llanto, del primer beso. La cantaora participa en esta obra hasta el día 6 de agosto. Linares, con su profunda voz, brilla con luz propia en el escenario. El espectáculo presenta cinco cuadros de danza para cinco personajes de la literatura de Lorca -Rosita, Don Perlimplín, Mariana, Adela y El Director- que comparten con el Cante Jondo la tragedia sin destinatario, que interviene en la pena con quien observa y escucha esta expresión social y racial de raíces borrosos, revueltos entre una queja de desdichas seculares, como el amor.

Una leyenda del flamenco

Carmen Pacheco Rodríguez, artísticamente conocida como Carmen Linares, está considerada como una de las cantaoras más completas y con mayor conocimiento de estilos flamencos junto a la Niña de los Peines. Compañera de generación de artistas como Paco de Lucía, Camarón, Enrique Morente, Pepe Habichuela y José Mercé, Linares es considerada una leyenda del flamenco.

Es, además, maestra y cantaora de referencia de la generación de artistas jóvenes como Estrella Morente, Miguel Poveda, Marina Heredia, Arcángel, Pitingo y Rocío Márquez. Ha trabajado y cosechado infinidad de éxitos que le han hecho erigirse como una de las artistas más aclamadas y con más proyección internacional del arte flamenco actuando en la última década en escenarios como Carnegie Hall de Nueva York, Sadler´s Wells de Londres, Palacio de la Música Catalana de Barcelona, Auditorio Nacional de Madrid y la Cité de la Musique de París.

El 5 de mayo de 2022, se le otorgó su último reconocimiento hasta la fecha: el Premio Princesa de Asturias de las Artes.

Granada, un lugar especial

-Una figura artística como es usted, ¿considera que el flamenco recibe el apoyo y el reconocimiento que merece en España?

-Creo que es un arte muy reconocido en nuestro país, pero sin duda debería reconocerse, cuidarse y potenciarse mucho más. El flamenco es algo necesario ya en nuestra cultura y pienso que necesitaría más apoyo.

-¿Cómo está siendo su experiencia en el espectáculo Jondo. Del primer llanto, del primer beso?

-Esta siendo preciosa, una experiencia muy bonita para mí. Canto tres poemas que representan el Cante Jondo, por lo que considero que soy y represento lo Jondo de la obra. Canto sobre el desamor, soy la consecuencia de ese encuentro y desencuentro.

-¿Qué le parece el montaje?

-Es un espectáculo precioso, una obra muy moderna con artistas que son buenísimos y fundamentales en el panorama de hoy día. Eduardo Guerrero es fantástico, es un placer trabajar con él. Pino Losada, el guitarrista, es maravilloso. Yo creo que es una obra extraordinaria con unos personajes muy bien definidos y vemos el desamor de todos muy claro. Estoy tremendamente satisfecha con mi participación, muy agradecida por volver al Generalife y muy contenta por darle voz a Lorca. Creo que la obra deja momentos únicos plasmados en la mente del espectador que son maravillosos.

-Las leyendas como usted no se retiran o se jubilan, ¿qué opina usted?

-Supongo que llegará el momento en el que me jubile, pero llevo el flamenco tan dentro de mí que no lo dejaré hasta que desaparezca de este mundo. Cuando sea más mayor haré menos actuaciones, pero la intensidad será la misma. Sea en el papel que sea, siempre estaré presente en el escenario, de una forma u otra. Necesito el flamenco en mi vida.

-¿Qué significó para usted el Premio Princesa de Asturias de las Artes?

-Fue una sorpresa y una alegría, la verdad. No sabía que había sido propuesta al premio y me quedé en shock. Es un premio muy importante para mi carrera y un reconocimiento al flamenco que me hace muy feliz. Que a través de María Pagés y de mí se reconozca el cante y la danza flamenca es maravilloso, estamos muy contentas y agradecidas.

-¿Siente ya Granada como su casa?

-Pues sí, me voy a tener que alquilar un apartamento. Granada siempre ha sido un lugar especial para mí. Le tengo mucho cariño a la ciudad y a la gente, los granadinos siempre me tratan con mucho amor. Allí he vivido momentos muy importantes e inolvidables para mí, con los Habichuela, con los Morente... Sigo teniendo un contacto muy muy estrecho con Granada, hay un arte impresionante. Recuerdo cuando iba a cantar al Corral del Carbón con Enrique..., es que es mi segunda casa, me han querido y me quieren mucho.