"Enrique Morente era mi ídolo"

-Acaba de obtener el tercer grado tras unos meses de reclusión, ¿cómo ha sido esta experiencia?

-Este episodio ha sido el último coletazo de una etapa muy mala de mi vida. Tengo una enfermedad, trastorno bipolar, y desde que dio la cara hasta que encontré un tratamiento adecuado fue una pesadilla. Una etapa muy dura, en la que estaba perdido en todos los sentidos, personal y profesionalmente. Cuando dimos con la medicación adecuada retomé mi carrera. Para ello fue fundamental el encuentro con Paco Bech. He retomado la guitarra, a nivel profesional, porque en realidad nunca la dejé. Me ha ayudado mucho el cariño de la gente. Cuando voy por la calle me dicen "Rafael, me alegro de verte tan bien" y esto me da fuerzas para seguir adelante. En los conciertos que estoy haciendo en toda España el público está encantado y he recibido muy buenas críticas. Esto me ayuda mucho. Así que este coletazo último de esa época tan negra no me va a quitar las ganas de seguir.

-Además de intérprete, usted es uno de los grandes compositores del flamenco contemporáneo, ¿qué método de trabajo utiliza en esta faceta?

-Parque de María Luisa, la obra que presenté en Sevilla, la compuse en Madrid. Imaginaba los sitios, los rincones del parque, y trataba de reflejarlos en la guitarra. Lugares y sensaciones. Trabajo primero con la idea y luego la plasmo en la guitarra. Los temas flamencos los trabajo también temáticamente, intentando que las falsetas estén relacionadas, contar una historia. Dedico un tiempo diario a la composición, de la misma manera que a la técnica. La composición es un espejo: unos días te ves más guapo y otros horrible. Pero hay que seguir. Hay que trabajar cada día.

-Se inspira en el paisaje y en la memoria. ¿Es su obra autobiográfica?

-Me nutro de mis recuerdos. Soy un enamorado de Sevilla, como casi todos los que nacimos o vivimos aquí. Sevilla entera está en el Parque de María Luisa, la luz quintaesenciada de la ciudad. Cosas que no se pueden decir con palabras y que yo he intentado decir con la guitarra. Por ejemplo, Plaza de España son unas sevillanas boleras, pero en las que resuenan ecos de la jota, la muñeira y el chotis, correspondientes a Aragón, Galicia y Madrid, tres de los bancos del parque. La jota está en el origen de las alegrías flamencas. Los Quintero pretende reflejar la gracia sevillana. En el Parque de María Luisa están todos los humores y sabores de Sevilla: la copla, la arquitectura, los pájaros, el agua, los jardines, la poesía... Por eso creo que es una obra importante para nuestra ciudad.

-El nacionalismo musical, Falla, Granados, o los sevillanos Turina y Font de Anta, ¿qué influencia ejerce en su música?

-Una influencia muy importante. En Iberia de Albéniz está todo el flamenco: el polo, la rondeña, los fandangos, la soleá, la seguiriya…

-En unos días se cumplirán cinco años de la muerte de Enrique Morente. ¿Qué recuerdos conserva del cantaor?

-Todos los recuerdos de Enrique son maravillosos. Me quería mucho, me buscaba para que tocara para él. Su sentido del humor todavía nos alimenta. Era un ejemplo para los más jóvenes. Era mi ídolo, desde su forma de vestir a su actitud. Su muerte fue un trauma.

-Es profesional de este arte desde principios de los 80. ¿Qué cambios ha observado en el flamenco a lo largo de estos años?

-Nos hemos vuelto más formales. Quizá eso ha traído una forma de frialdad. Yo viví una edad dorada: conocí a Mairena, al Niño Miguel, al Paco de Lucía de su eclosión, con Sabicas y Ricardo en un recuerdo muy reciente. Había mucha relación entre los artistas. El flamenco se alimenta también de esa relación personal.

-¿Cómo decide que una composición es más adecuada para tocar en solitario o con el grupo?

-Parque de María Luisa está compuesta en la guitarra. Después fui pensando los arreglos. Fueron decisiones muy difíciles porque lo que pretendía expresar está lleno de matices y dinámicas distintas.

-Hace casi dos décadas que los aficionados no disfrutan de una nueva grabación suya...

-Hay partes de Parque de María Luisa que ya están grabadas. Después del de Sevilla tengo otros dos conciertos y luego registraré la obra completa. Es muy compleja, he hecho muchas maquetas para ver cómo sonaba la misma música con arreglos distintos. En unos meses el disco estará en la calle. También quiero grabar otro de estilos flamencos. Tengo una soleá por bulería nueva terminada, una rumba, y falsetas por taranta, soleá, rondeña... que hay que arreglar, aunque ya las toco en directo. Creo que estoy en la obligación de hacerlo. También me gustaría reeditar mis discos de los 80 y 90.