"Ilocuo es un trasunto de las emociones y de los sentimientos internos del ser humano"
Ana Vílchez, bailarina y coreógrafa
La compañía de Ana Vílchez vuelve a sorprender con un espectáculo cargado de referencias sensitivas y arte
Granada/Ilocuo, el nuevo espectáculo de la Compañía de Ana Vílchez, se estrena en Granada dentro del ciclo Patrimonio Flamenco. Herencia del 22 que el Ayuntamiento de Granada organiza dentro de la programación del espacio cultural La Chumbera. Una de las mecas del flamenco en Granada recibe a tres exponentes de la expresión corporal aunando baile español, baile flamenco y danza contemporánea en una producción novedosa tanto por su concepción argumental como por su desarrollo artístico.
Ana Vílchez Fernández, bailarina y coreógrafa, fundó su compañía en 2015. Su primera producción, La vida es bella se estrenaba ese mismo año, y durante cinco temporadas ha estado de gira por los principales teatros andaluces; muchos lectores quizás recuerden el éxito que obtuvo en su representación en 2017 en el
Teatro Isabel la Católica. Ahora, pasado el necesario periodo de inactividad motivado por la pandemia que ha afectado inevitablemente al mundo creativo, nos presenta una apuesta inteligente, arriesgada y llena de creatividad y arte. Junto a Ana Vílchez se encuentran en el escenario otros dos artistas con los que la
creadora ya ha colaborado en el pasado: Miguel Ángel TalaverónAtoche, también conocido con El niño del Roete, un bailarín que ha trabajado con algunas de las figuras más grandes del baile flamenco y que ha desarrollado una intensa labor en la danzaterapia y la inclusión a través del baile; y Dogy del Río, intérprete que aúna la pedagogía y la danza contemporánea en su actividad profesional. A tan solo unas pocas horas de desvelar la magia de Ilocuo, Ana Vílchez nos cuenta en exclusiva algunas de las claves de su espectáculo.
-¿De dónde viene el título?
-El título viene de fusión metafórica de las palabras ilógico y loco; en este sentido, se pretende explorar el elemento irracional de las emociones humanas. He querido buscar en las distintas disciplinas de cada intérprete un estilo único, adecuado para definir este mundo ilocuano.
-¿Cómo se te ocurrió el espectáculo?
-En la sociedad actual hablar de emociones contrarias en el plano psicológico todavía es un tema tabú, y por este motivo su traducción en movimiento con un contexto artístico ha sido para mí una vía de expresión y una válvula de escape de todo lo sentido y vivido en estos últimos años. Ilocuo es un trasunto de las emociones y de los sentimientos internos del ser humano, haciendo guiños tanto a las sensaciones positivas como a aquellas que socialmente tienen un carácter más negativo, pero que igualmente hay que normalizar y aceptar.
-Solo tres bailarines en escena, ¿hay un por qué?
-Cada uno representa un estilo de danza diferente, y a su vez una emoción de base que sin embargo muta cuando entra en contacto con las demás. En un mundo en el que ya no se practican las emociones, el acceso a Ilocuo permite al ser humano recuperarlas, volver a sentirlas y a experimentarlas, ya sea por medio de
los estímulos propios de este mundo, ya por la ayuda terapéutica de una voz en off, una alegoría a la ruptura de la cuarta pared a nivel psicológico que permite al espectador entrar con mayor facilidad al universo onírico en el que se desarrolla la acción y comprender plenamente a sus protagonistas.
-El uso inteligente y a su vez austero de elementos como la escenografía, el vestuario o la iluminación centran la atención en la acción corporal ¿es algo intencionado?
-Sí, sin duda. Habría sido muy sencillo crear elementos extracorporales que despertasen la atención del espectador. Sin embargo, hemos optado por algo más arriesgado pero a la vez más artístico, que es potenciar el elemento narrativo del baile y la expresión corporal. De este modo, lo que destacamos es el movimiento, esperando que sea lo que quede en la memoria colectiva; Ilocuo es fusión creativa a nivel artístico, porque sin ser flamenco, danza española o contemporánea, lo es todo a la vez.
-¿Es difícil afrontar la creación en estos momentos?
-Sin duda ha sido complicado, en general, mantener la actividad artística, pero hemos de decir que la respuesta del público siempre ha resultado ser excepcional y maravillosa, y ese apoyo me anima a seguir adelante. En Ilocuo hay una mención simbólica a la situación de momento pandémico, en relación con las emociones, o mejor dicho, la falta de las mismas por la falta de contacto a la que nos hemos visto
obligados. En este sentido, he querido volver al origen de las emociones para reactivar los hábitos sociales que se habían olvidado, pero que permanecían latentes en el subconsciente.
Sin duda, nos dejas mucho en lo que pensar y ofreces múltiples atractivos para ver Ilocuo, que se estrena en el Teatro La Chumbera el próximo sábado 2 de abril, a las 21:00 horas. Una oportunidad única para disfrutar de todo lo que el arte y la danza puede ofrecer a nuestro universo emocional.
No hay comentarios