Múltiples rostros
El Anticuario Ruiz Linares acoge desde hoy hasta el próximo 31 de octubre el regreso a Granada de Paco Montañés: una selección de 30 retratos realizados en los últimos 15 años
Paco Montañés no volvía a Granada desde el año 2012, cuando expuso en Condes de Gabia. Sus constantes viajes por todo el mundo lo habían mantenido alejado de la que denomina "su segunda ciudad", aquella en la que ha residido durante más de diez años, en la que se licenció en Bellas Artes y obtuvo el Premio Nacional de Bellas Artes del Ministerio de Educación. Treinta retratos y el Anticuario Ruiz Linares lo han traído de vuelta con una muestra que es también una reflexión sobre el aprendizaje y un tributo a los grandes maestros.
Desde hoy mismo hasta el próximo 31 de octubre podrá verse en el espacio expositivo del anticuario de la calle Estribo, a las espaldas de Gran Vía, una selección de obras que tiene su origen en la última retrospectiva del pintor jienense en Alcalá la Real. Allí, en el Aula Magna del Convento de los Capuchinos, ha expuesto durante todo el mes de agosto sus mejores trabajos en el terreno del retrato realizados en los últimos 15 años. La muestra estaba compuesta por 70 piezas, de las que ha elegido una treintena de formato más pequeño, "más íntimo", en palabras del propio autor, para esta colección aún más selecta que lleva por título El retrato y los maestros antiguos.
En esta selección se conjugan los dos tipos de obras que componen la muestra: "Retratos de personas que he conocido en estos años y estudios de retratos de maestros antiguos".
El pintor dice así saldar "una deuda contraída" con todos ellos, porque "no hay manera de conseguir un buen retrato" sin estudiar a los clásicos.
De estos estudios, Montañés destaca dos de los que pueden verse estos días en Granada: la imagen de una escultura de una cabeza de medusa y un retrato femenino basado en un cuadro del barroco italiano. "Es importante también que se vea que mi formación no es eurocentrista", explica el autor, que ha residido varios años en países orientales.
En cuanto a los de personas -y también un animal, un perro- conocidos en estos años, el autor incluye muchos rostros conocidas en esos viajes y esas estancias en el extranjero. "Acabo de venir de pasar un año en China con la beca Manuel Ribera", explica el autor, que también ha querido incluir un retrato de uno de los mecenas más importantes de la India, al que conoció en una visita reciente.
Y, entre las piezas más impactantes de la selección granadina, Montañés destaca una que llega precedida por el éxito que ha cosechado en la exposición jienense: una miniatura circular de 7 centímetros que es el retrato de una mujer. "Lo importante es que se vea el diálogo entre un tipo de obras y otras, las de estudio", cuenta Montañés, que demuestra en esta exposición su solvencia con prácticamente todas las técnicas pictóricas posibles.
Su extensa e intensa formación explican su dominio del medio y la consagración de su firma, ya que ha acumulado becas y premios en los quince años en los que ha estado trabajando en estas obras. Con ese aval vuelve Montañés a Granada y al espacio Ruiz Linares. "Esta muestra es también un aniversario, porque hace cinco años que expuse aquí", comenta.
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