The Tallest Man on Earth cierra la primera edición de Fonorama

El músico actúa esta noche en el Teatro Isidoro Máiquez de CajaGranada

The Tallest Man on Earth, en un concierto.
The Tallest Man on Earth, en un concierto.
Redacción / Granada

12 de marzo 2010 - 05:00

Hoy, a las 21.00 horas, The Tallest Man On Earth presenta en el Teatro CajaGranada Isidoro Máiquez, alguno de los temas de su segundo álbum, que verá la luz el próximo mes de abril, tras la excelente acogida de su primer trabajo Shalow grave , publicado en el año 2008.

The Tallest Man On Earth -cuyo verdadero nombre es Kristian Matsson-, representa probablemente una de las sorpresas más gratas del folk. De gira por España, hoy presentará algunos de los temas de su segundo disco. Armado únicamente con su voz, su guitarra y su banjo, The Tallest Man On Earth presentará ante su público, grandes y desgarradoras canciones, casi con letras de poeta.

Próximo a la música del Bob Dylan de la guitarra, la armónica y su voz inolvidable, Kristian Matsson -o "el hombre más alto de la tierra", como se hace llamar este cantante sueco-, se dirige a su audiencia más allá de los estereotipos.

Su manera de tocar la guitarra, su acento sureño estadounidense, la naturalidad con la que impregna sus actuaciones, así como sus historias de amor y carretera, han llamado la atención de público y crítica. Los medios especializados dicen de este cantante que, "en directo, se crece", así como que es valiente, intenso y que atraviesa el tiempo.

Kristian Matsson, que comenzó su carrera como cantante en el grupo sueco The Moctezumas, representa el regreso a la canción folk al más puro estilo norteamericano, en el que la música está al servicio de la voz y no al revés, como sucede en géneros como el rock o el pop. Sus letras son la esencia de sus canciones y sus vivencias quedan reflejadas en los versos que pululan por cada una de sus canciones.

La de The Tallest Man On Earth es la reivindicación del estilo que los años cincuenta y sesenta alcanzó su máximo esplendor en las figuras de Woody Guthrie o Bob Dylan: gargantas secas y desgarradas, versos hirientes como cuchillos y una guitarra o un baño como única arma de guerra del músico. Se trata de estilo que está muy emparentado con la calle y con la economía de medios, que pretende atrapar al transeúnte desde el primer momento y lanzarle las palabras como si fueran dardos en una diana.

El músico se encuentra ahora inmerso en una extensa gira por todo el mundo tras el éxito que ha alcanzado con sus trabajos discográficos y la sorpresa que ha supuesto en el mercado la irrupción de un género musical que se creía abandonado y que vuelve a cobrar ahora un enorme vigor. Con este concierto concluye el primer ciclo de Fonorama, que ha traído en esta edición a músicos como Antonio Arias, de Lagartija Nick, o Dominique A.

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