Todas ellas eran Marilyn

"La mujer que no es deseada, no existe". La frase que desde muy joven le repetía una y otra vez a Marilyn Monroe su tutora legal, Grace Goddard, se convirtió en el mejor resumen de la vida de la actriz, siempre pendiente de agradar a unos y a otros olvidándose de ella misma y cometiendo error tras error en aquello que más anhelaba: encontrar a su verdadero amor. Marilyn no es Monroe, la obra que la compañía de Teatro Leído nacida de la Tertulia del Salón puso anoche en escena en el Teatro de CajaGranada con motivo de la celebración del festival de cine clásico RetroBack, ahonda en la otra mujer desconocida que hay detrás de la Marilyn famosa para acercar el mito al mundo real y contar que, en su historia, también se derramaron muchas lágrimas.

Escrita por el granadino Gregorio Morales, Marilyn no es Monroe parte de una conversación de la actriz con su psiquiatra, el doctor Ralph Greenson, cuya principal intención pasa por aunar a las dos Marilyn que existían: la actriz famosa que tenía todo cuanto tenía y la joven incapaz de encontrar la felicidad.

"Esta obra se sale de los estereotipos que todos tenemos de Marilyn Monroe", cuenta la directora de la obra, Eva María Velázquez. "La de Marilyn fue una vida muy dura cargada de momentos muy dramáticos desde la ausencia de su madre en su infancia hasta el maltrato que recibía de uno de sus maridos, Joe DiMaggio", añade.

Se trata del primer acercamiento escénico total de este grupo, aunque su condición de compañía de teatro leído hace que los actores interactúen sobre el escenario "libreto en mano". Pero no serán los únicos en escena, ya que la obra cuenta con música en directo a cargo de una orquesta y con la actuación de un grupo de bailarinas de último curso del Real Conservatorio Superior de Música Victoria Eugenia.

Sobre el escenario se podrán ver a actores como Carolina Murcia, Ana Morilla Palacios, Pilar Redondo, Carmen Vera, Paca Segura, Rubén Pereira o David Escobedo, algunos de los cuales cuentan con una larga trayectoria como actores de teatro y para numerosas series de televisión.

Después de tres meses de trabajo, la intención de Eva María Velázquez sigue estando igual de clara que desde el principio: "He intentado ser lo más fiel posible al texto de la obra, que me parece maravilloso. Además, hemos querido añadir algunas pinceladas de Granada, para que la obra se sienta más cercana al público".

Tras su estreno de ayer, Marilyn no es Monroe se queda a la espera de la confirmación para una próxima actuación en la ciudad francesa de Toulouse, donde estaba previsto inicialmente su estreno.