Amaral pone un apoteósico broche de oro a su gira y al 1001 Músicas

Granada/Con las entradas agotadas desde hace meses, la presencia de Amaral en el Teatro del Generalife era una de las actuaciones más deseadas en la edición del ciclo 1001 Músicas. Y lo cierto es que las expectativas se han cumplido con creces merced a una actuación memorable del dúo aragonés con la que no solo han puesto el broche de oro a su gira de este año por España y presentado el tercer adelanto del que será su nuevo disco, sino que también ha servido para bajar el telón de este festival, que ya trabaja con ilusión para confeccionar el mejor cartel posible para 2025.

La esperada actuación de Amaral en el Teatro del Generalife se convirtió en una autentica celebración, de los 25 años de carrera musical cumplidos por Eva Amaral y Juan Aguirre, del fin de su gira 2024 en España y del cierre de la cuarta edición de 1001 Músicas, pero también de la celebración de la amistad y los vínculos que se crean entre los artistas y su público, no solo en una noche memorable como esta sino de todo lo que implica la música en la vida de una persona y sus recuerdos; y es que más de dos décadas de himnos para varias generaciones dan para mucho.

La actuación arrancó con una versión extendida de Sin ti no soy nada, a la que le siguieron Mares igual que tú, Días de verano y el primer single de su próximo trabajo Rompehielos. Como no podía ser de otra manera, el público saltó de la butaca con Toda la noche en la calle, tras esta llegaron Salta y el bloque formado por No sé qué hacer con mi vida -un recordatorio a la incertidumbre de sus inicios como la propia Eva compartió con el público- Estrella de mar y Hoy es principio del final.

Sonaron Salir corriendo (en versión acústica), Nuestro tiempo, Moriría por vos, Nocturnal, Multitud y Ruido hasta llegar a la presentación del segundo sencillo que se hizo público hace apenas unas semanas Ahí estás. El recorrido por la trayectoria del dúo continuó con Resurrección, Cómo hablar, Kamikaze, Hacia lo salvaje y Revolución, siempre acompañadas por el coro de un público entregado desde el primer momento.

El diálogo con el auditorio fue constante y cercano, disfrutando de poder tomarse su tiempo para presentar los temas, bromear y crear un clima cómplice entre la cantante y el público.

El primer bis llegó con una de las grandes sorpresas de la noche, el estreno mundial de Libre la tercera canción del nuevo disco, del que todavía no pueden desvelar el nombre, hecho con el que la pareja artística bromeó en varias ocasiones a lo largo del espectáculo. El final llegó con Marta, Sebas, Guille y los demás, El universo sobre mí y un segundo bis con Cuando suba la marea.

Hubo momentos para agradecimientos, muchos, para el público allí congregado y los fieles que los han acompañado a lo largo de su carrera, para los equipos, propios y del festival, y para todos los que hacen posible que sigan haciendo lo que mejor saben hacer, compartir su amor por la señorita rock & roll.