La capital ‘se prende’ al ritmo latino

“Son las cinco de la mañana y yo no he dormido nada” o algo así debían de cantar anoche muchos de los asistentes a la tercera edición del Granada Latina, que volvió a congregar a miles de asistentes al Cortijo del Conde para disfrutar de los principales nombres de la escena urbana en español. 

Quienes disfrutasen de la experiencia completa del festival aguantaron más de doce horas sobre el alvero del espacio, que abrió sus puertas sobre las 16:00 horas del sábado y comenzó oficialmente pasadas las 16:30 con Cano, quien comenzó a animar al público. Vestido de obligado blanco y pantalón corto –imprescindible para aguantar el calor– el autor de Cuando ella se va empezó a poner a los valientes capaces de aguantar a esas horas bajo el sol. Tras él, repitiendo look, fue el turno de Ballesteros, que cambió el micro por los platos y fue el encargado de terminar de arrancar la maquinaria. 

Ya sobre las 18:00 horas, y con el mercurio dando un respiro, fue el turno de uno de los platos fuertes de la jornada: Morad. El de Hospitalet de Llobregat volvía por segundo año consecutivo al recinto del Cortijo del Conde y parece que el público no se aburrió de él. 

Seya, Lo que tiene y, por supuesto, Pelele fueron algunas de las canciones que puso sobre el escenario el artista, que llegó a ondear la bander andaluza, mientras que en el público varias personas hacian lo propio con la de Marruecos. 

Y si se trata de acertar la set list, María Becerra tampoco falló. La argentina le dio al público lo que estaba esperando, Miénteme. Aunque su compatriota TINI no estuvo sobre el escenario, María Becerra se subió a la tarima con cuerpo de baile que le acompañó durante una actuación en la que no faltaron otros temas como Cázame o La nena de Argentina. 

Tras un merecido descanso, llegó el turno de la que posiblemente fuese la reina de la noche, Lola Índigo, que plantó su ya famoso huevo de dragón sobre el escenario. Con su nuevo pelo rojo, Mimi llegó al escenario ya con la noche caída y el público, ahora sí, entregado sin el miedo a una insolación. 

Índigo lleva tiempo demostrando que es un animal sobre el escenario y que sabe meterse al público en el bolsillo y ayer lo demostró de nuevo, contando eso sí con la ayuda de María Becerra que volvió, cambio de outfit mediante, a subirse al escenario del Cortijo del Conde para acompañar a su amiga. 

Montar y desmontar un escenario como el de la granadina conlleva tiempo y poco a poco el planning previsto inicialmente iba dilatándose. Fue así comoel otro granadino en la parrilla de salida, Maka, saltó sobre la tarima ya rozando la media noche y encarando, de paso, los últimos momentos de esta tercera edición. 

Con el permiso de Maka, ya casi a las dos de la madrugada fue el turno de uno de los principales reclamos del cartel, Anuel AA. Como Índigo, el puertoriqueño tiene tablas en el escenario y la hora no fue excusa para no levantar el ambiente de un público, ya exiguo, pero que lo dio todo. 

JC Reyes (que regresa a Granada tras acompañar a Saiko en Los Cármenes), fue el siguiente en salir a jugar el partido del Cortijo del Conde. Y, para poner el punto final, otro puertoriqueño, Jhayco, que comenzó a hacer lo suyo cuando el sol estaba pronto otra vez a salir.