El maestro Juan Martínez que estaba allí
Juan Martínez existió
Música
El pasado sábado, el Desguace Suspiro se convirtió en el epicentro del evento solidario Rock en el Desguace para apoyar a la asociación AÚPA en su labor de ayudar a las familias granadinas afectadas por el cáncer infantil. A pesar de la persistente lluvia que acompañó el evento hasta unas horas antes de su conclusión, la primera edición de este festival fue un éxito rotundo, según aseguran los organizadores en una nota de prensa.
Desde primeras horas de la mañana, el ambiente festivo inundó el Desguace Suspiro con una amplia gama de actividades para toda la familia. Música rock, espectáculo de magia y un monólogo, el programa tenía un objetivo claro: entretener y concienciar sobre la importante labor de AÚPA.
La organización de este evento solidario fue posible gracias a la estrecha colaboración entre la asociación y el propio desguace, así como el apoyo de diversas empresas que aportaron su gratino de arena, "contribuyendo con generosidad para hacer de este día una realidad", explican desde la organización.
Todo lo recaudado en taquilla, con 700 entradas vendidas, unido a las aportaciones de las empresas patrocinadoras asciende a casi 20.000€ será destinado íntegramente a AÚPA, para continuar con su labor de apoyo a las familias afectadas por el cáncer infantil en Granada.
El festival no solo ofreció entretenimiento de calidad, sino también una experiencia gastronómica excepcional. Los asistentes tuvieron la oportunidad de disfrutar de un exquisito arroz, cortador de jamón y muchas otras delicias culinarias para mayores y pequeños.
Destacados artistas contribuyeron a hacer de esta jornada un evento inolvidable. El monologuista Christian García arrancó carcajadas con su humor irreverente, mientras que el internacional mago Magomigue cautivó a todos con sus increíbles trucos de magia. A continuación la música hizo acto de presencia en el festival, primero con la banda Sal y Tequila y como cabeza de cartel, Los Berrinches, quienes hicieron vibrar a los más roqueros con sus potentes interpretaciones.
En definitiva, Rock en el Desguace fue mucho más que un evento solidario; fue una jornada familiar donde pequeños y mayores se unieron en un ambiente festivo y solidario. Ante el éxito abrumador de esta primera edición, la organización ya amenaza con futuras ediciones para seguir apoyando a la asociación AÚPA y a las familias que tanto lo necesitan.
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