En Europa, con las víctimas del franquismo

HEMOS estado en Bruselas para pedir al Parlamento Europeo que exija al Gobierno español la creación de una Comisión de la Verdad. Es la primera vez, en 35 años de democracia, que se escucha la voz de las víctimas del franquismo en la Eurocámara. Cuarenta familiares y miembros de asociaciones memorialistas, procedentes de Andalucía, Madrid, Euskadi y Aragón, nos hemos desplazado a la capital de la Unión Europea para denunciar el desamparo y abandono institucional que sufrimos en España por parte del gobierno y del poder judicial. Y hemos pedido, con el apoyo del relator especial de la ONU, Pablo De Greiff, la derogación de la Ley de Amnistía del 77, utilizada por los tribunales españoles como ley de punto final, para impedir la investigación de 120.000 desaparecidos en fosas comunes y cunetas.

Al frente de la delegación andaluza, Luis Naranjo, director general de Memoria Democrática, que intervino en el Europarlamento para exigir que el Estado español ponga en marcha una comisión, impulsada por el propio gobierno y formada por expertos y juristas de reconocido prestigio internacional: "Una comisión -dijo- que sea capaz de reconstruir la verdad oficial y científica sobre los crímenes de lesa humanidad cometidos por el franquismo". Naranjo denunció también la permanencia de símbolos de la dictadura en calles y plazas, y puso como ejemplo la escultura fascista de Bibataubín, en Granada, "que hace apología del saludo nazi y supone una ofensa para los demócratas europeos".

El momento más emotivo que se vivió en el Parlamento lo protagonizaron los familiares de las víctimas: "Quiero que busquen a mi padre, que me digan qué hicieron con él y cómo lo mataron. No nos dejen solos", dijo Remedios Gómez a los eurodiputados. Y Flor Díaz Carrasco, madre de un niño robado, exigió con firmeza: "Queremos a nuestros hijos, vivos o muertos, pero los queremos con nosotras". En una intervención estremecedora, que recordó a las madres argentinas de la Plaza de Mayo, apeló a la responsabilidad de la Eurocámara: "Europa no puede permanecer al margen. Hay niños robados, que fueron deliberadamente deportados, y que hoy tienen apellidos alemanes". No menos contundente se mostró María Carrasco: "Necesitamos vuestra ayuda para recuperar a nuestros hijos. Queremos que se pongan en nuestra piel y nos ayuden a pedir una investigación". Y entre los testimonios, también destacó el de Paqui Maqueda, que estuvo en Argentina para denunciar el asesinato de sus familiares ante la jueza María Servini, que investiga los crímenes del franquismo, y ahora ha viajado al Europarlamento, buscando la justicia que le niegan los jueces españoles.

Eurodiputados del PSOE, IU, ICV, PNV y Aralar han firmado ya una declaración de apoyo a las víctimas del franquismo. Willy Meyer, portavoz de Izquierda Unida y promotor de la iniciativa, recordó que el Estado español es el único de la Unión Europea que mantiene esta "anomalía democrática" y se comprometió a defender la Comisión de la Verdad en el Parlamento Europeo. Asimismo, Antonio Masip, miembro de la Comisión Jurídica, subrayó que la Memoria Histórica es un asunto de competencia europea y puso el acento en los 30.000 niños robados por la dictadura franquista

David Owen, representante de la Eurocámara, fue el encargado de recoger la petición de amparo de la Plataforma por la Comisión de la Verdad en la que se dice: "Queremos apelar a la conciencia de los parlamentarios europeos, a la Europa democrática y antifascista, para que se acabe con la injusticia y la desigualdad entre las víctimas. Unas víctimas, con sus derechos reconocidos, como ocurre en España con las del terrorismo y en Europa con las del nazismo, fascismo y estalinismo, y otras sin derechos ni reconocimiento, como las víctimas del franquismo".