La Rayuela
Lola Quero
Nadal ya no es de este tiempo
El niño del rollo
En las consejerías de la Junta se han colocado varios bromistas del pueblo de Gila, de esos que gastan bromas para ver qué cara se le queda a la gente. El otro día incluyeron las palabras "extinción y disolución", a propósito de la Escuela Andaluza de Salud Pública (EASP), en una Proposición de Ley presentada por el PP. Luego esperaron a ver qué decían quienes trabajan en dicha Escuela. Cosas de muchachos.
La plantilla no está acostumbrada a tales bromas y se alarmó. A la gerente de la EASP, del PP, le sorprende tanta alarma por dos palabritas de nada. Como diría Gila: si no saben aguantar una broma, ¿qué hacen trabajando para la Junta?
En la Consejería de Educación, controlada por Ciudadanos, se han infiltrado bromistas del mismo pueblo. Hace poco, en el IES Veleta se enteraron de que la Junta pensaba cerrar su centro. Jaja. Rápidamente, la Oficina "Es broma, es broma" de la Junta aclaró que no se trataba de un cierre, sino de un traslado: la gente del Veleta se trasladará a un colegio y este se convertirá en un centro donde se imparten todos los niveles de la educación obligatoria (lo que llaman un CEIPSO). No sé si esto es buena idea, pero habría estado bien discutirla con la comunidad educativa antes de ponerse a cerrar nada. Claro que, si les quitas la sorpresa, las bromas no tienen ni la mitad de gracia.
En el caso de la EASP, el portavoz del PP en el Parlamento Andaluz ha aclarado que lo de "extinción y disolución" es una forma de hablar y que solo se trata de introducir algunas mejoras administrativas. Si esto es así, ya podían haber discutido antes la Proposición de Ley con la plantilla, en vez de intentar tranquilizarla después.
¿Van a desaparecer el IES Veleta y la EASP o se trata de sendas bromas? Lo de la "extinción y disolución" está escrito; el compromiso de las autoridades con la educación y la sanidad públicas es de palabra. Las palabras nos tranquilizarían más, quizá, si el consejero de Educación no fuera un empresario de la enseñanza privada que han puesto a cuidar de la pública, si no tuviéramos el precedente del Parque de las Ciencias y si no conociéramos las fechorías cometidas por el PP contra la sanidad pública madrileña.
Pero no cunda el pánico: quizá todo quede en un susto. Y, bueno, si finalmente hay cierres, podremos decir con Gila: "Nos habéis dejao sin Escuela; pero ¿y lo que nos hemos reído?"
También te puede interesar
Lo último