Una encuesta a pie de caña

Hace unos días hice un experimento con unos amigos con los de vez en cuando salgo a tomar cañas por las tabernas del barrio. Estábamos diez. Era un grupo heterogéneo formado por jubilados, trabajadores en activo, amas de casa… Varios con carreras universitarias. Entonces pregunté si alguno sabía el nombre de algún consejero de la Junta de Andalucía. Quitando a Juanma Moreno, el presidente, nadie sabía el nombre de un consejero del Gobierno andaluz. Después les pregunté si habían votado en las últimas elecciones europeas. Siete de los diez lo habían hecho. Les pregunté después si sabían el nombre de algún parlamentario europeo elegido por Granada. Nada de nada. Una de las amigas dijo que ella había votado al PP, pero que no sabía quién encabezaba la lista. Tampoco nadie sabía el nombre del presidente de la Diputación de Granada y mucho menos el de algún diputado provincial. Asimismo, ninguno me dio el nombre de algún delegado de la Junta en Granada. En cuanto a los ministros, tampoco sabían el nombre de alguno de ellos. Les sonaba solo Marlaska, pero reconocían que más que nada era por la parafernalia mediática que rodea al susodicho. En el Ayuntamiento de Granada salieron un poco mejor parados. Todos sabían el nombre de la alcaldesa y de algún que otro concejal. Los encuestados mismos reconocieron su ignorancia en este tema, pero nadie parecía pesaroso por no haber acertado casi ninguna de mis preguntas. Eso sí, se acordaban de muchos políticos locales de la transición.

El experimento lo repetí después en mi pueblo con otro grupo de amigos de la infancia, hoy todos setentones. Los resultados fueron prácticamente idénticos. ¡Casi nadie conoce el nombre de los políticos que nos gobiernan! Hay actualmente tal desafección hacia la política que son muy pocas las personas que conocen la identidad de los hombres y mujeres en los que hemos depositado nuestra confianza cuando hemos acudido a las urnas. Hágase usted, querido lector, este mismo experimento o repítalo en su entorno más cercano. Reúna a unas cuantas personas y les pregunta el nombre de algún cargo político actual de Granada. Estoy convencido de que los resultados serían iguales. Antes de hacer el experimento sepa que en Granada hay 14 diputados provinciales, 11 delegados de la Junta de Andalucía, 13 parlamentarios andaluces, 27 concejales en el Ayuntamiento de Granada, 7 diputados del Congreso por Granada, 4 senadores, 3 europarlamentarios… El que le diga un par de nombres lo invita a una milno con quisquillas de Motril. ¡Qué menos!