La llave del candado

Cual Sísifo, Granada (y el resto de España) parece condenada a empujar eternamente la piedra que supone el problema de los pisos turísticos. Después de las manifestaciones de hace unos días y la decisión del Ayuntamiento de abordar el tema de las licencias, el problema parecía aflojar, pero era solo un alto en el camino y el próximo miércoles la piedra volverá a girar cuando se debata el asunto en el Parlamento andaluz. Nadie sabe qué ocurrirá tras ese debate, pero parece difícil que salga una solución de él. El tema es cuanto menos complejo y es fácil comprender los motivos de las dos partes: los vecinos quieren vivir en tranquilidad, sin avalanchas de turistas, pero no se puede ignorar que este sector tiene un gran peso en el PIB sin el que es difícil seguir adelante. Está claro que a nuestro Sísifo le queda aún mucho tiempo empujando la piedra o, usando una metáfora algo menos anticuada, parece que la llave del candado que permita abrir este problema aún no se ha encontrado. De una forma u otra, hay que agradecer que se esté moviendo el asunto, eppur si muove. Otra referencia antigua.