Detienen a una mujer por robarle a un anciano dos cadenas de oro en Granada

La Guardia Civil ha detenido a una mujer de cincuenta y siete años de edad, con antecedentes policiales, como presunta autora de un delito de hurto por el método del “abrazo cariñoso” a un hombre de ochenta y cinco años de edad de la localidad de Maracena.

La detenida ha actuado mediante el método denominado del “abrazo cariñoso”, que consiste en desviar la atención del anciano o anciana para sustraerle sin que se dé cuenta las joyas que llevara encima.

El hurto se produjo el pasado día 7 de julio. La detenida se acercó a su víctima, se ha abrazado al anciano y le ha dicho que se alegraba mucho de verlo, y cuando este le contestó que no la conocía, ella le dijo que era hija de un amigo suyo. Lo ha acompañado durante un rato con una actitud muy cariñosa y cuando finalmente se marchó, esta persona mayor se ha percatado de que le había robado dos cadenas de oro que llevaba al cuello valoradas en 3000 euros.

El anciano presentó denuncia en el acuartelamiento de la Guardia Civil de Maracena. Los investigadores de este puesto acudieron a la calle donde se produjo el encuentro entre la víctima y la supuesta ladrona y localizaron una cámara de seguridad en la que han conseguido identificar a esta mujer.

La mujer ha sido detenida y, tras prestar declaración en el acuartelamiento de Maracena junto a su abogado, ha sido puesta en libertad.

Esta modalidad delictiva está de moda desde hace varios años. La utilizan normalmente bandas criminales de países del este de Europa que trabajan de forma itinerante y no permanecen mucho tiempo en un mismo lugar, lo que dificulta su identificación, localización y detención.

Escogen a sus víctimas entre las personas de avanzada edad a las que previamente han observado que exhiben joyas o relojes de valor. Se acercan a ellas, desvían su atención con cualquier excusa, las abrazan y aprovechan ese momento para sustraerle las joyas que llevan puestas. Inmediatamente después, y antes de que el anciano o anciana se dé cuenta de que ha sido víctima de un robo, la ladrona se marcha del lugar en un vehículo que la espera en un lugar próximo para huir con el botín.