La exalcaldesa de Láchar se acoge a su derecho a no declarar en el caso de las grabaciones
Tribunales
La semana pasada declaró, en calidad de perjudicado, el todavía alcalde socialista del municipio, Pedro Sánchez, quien ratificó su denuncia por presuntas grabaciones irregulares en su despacho desde que comenzara su mandato
El alcalde de Láchar reconoce su voz en los audios pero insiste en que están manipulados
IU y PP registran una moción de censura en Láchar con Elisabeth Barnés como candidata
El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 de Santa Fe, en el Área Metropolitana de Granada, ha citado a declarar este miércoles como investigada por un posible delito de revelación de secretos a la exalcaldesa de Láchar, Mari Nieves López (IU), en el caso en el que se investigan unas grabaciones realizadas de forma irregular en el despacho de Alcaldía desde que comenzara el mandato socialista.
López ha acudido al juzgado mostrando su disposición a colaborar con el procedimiento, si bien se ha acogido a su derecho a no declarar en tanto la causa permanece declarada secreta y desconoce las líneas de investigación que se están llevando a cabo por parte de la Guardia Civil.
La semana pasada declaró, en calidad de perjudicado, el todavía alcalde socialista de Láchar, Pedro Sánchez, quien ratificó su denuncia por presuntas grabaciones irregulares en su despacho desde que comenzara su mandato. Unos audios que han desencadenado la moción de censura que, precisamente ese día, registraron IU y PP para desalojarle de la Alcaldía.
Una vez formalizada su personación en la causa, el regidor ha solicitado la declaración de diversos testigos, entre ellos, están los vecinos que recibieron por correo ordinario las cartas con un pendrive que contenía las grabaciones y también de quienes "aparentemente" aparecen en esas conversaciones en el despacho de Alcaldía.
Según explicó en su día en rueda de prensa, supo de la existencia de estos audios a raíz de que Mari Nieves López supuestamente los difundiera en un grupo de WhatsApp en el cual hay muchos vecinos del municipio. Todo ello propició que la Guardia Civil abriera una investigación para esclarecer el asunto que incluyó una inspección en el propio consistorio en busca de posibles micrófonos ocultos que no se encontraron.
La exregidora niega haber grabado estos audios, los cuales le habrían llegado por correo ordinario a su casa y a la de otros vecinos, según las declaraciones que hizo hace unos días ante los medios de comunicación.
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