El frío devuelve la estampa de la trashumancia a Granada

En esta época del año y fiel a una tradición que pasa de generación en generación, con la llegada del frío y la consiguiente bajada de temperaturas es posible contemplar cómo el ganado trashumante procedente de la Alpujarra de Granada busca lugares más cálidos, como la Costa Tropical, donde poder pastar.

Pastores como Gabriel Gallegos, acompañado por algunos amigos, continúa esta tradición ancestral y este lunes ha guiado a más de 1.500 ovejas en un recorrido a pie repartido en seis etapas que suman más de 100 kilómetros desde Capileira, en la Alpujarra, hasta La Herradura, en la costa.

Gallegos, posiblemente uno de los últimos pastores trashumantes de la provincia de Granada, destaca a EFE que durante estos seis días, siempre acompañado por la Guardia Civil de Tráfico a su paso por las carreteras nacionales o comarcales, se enfrenta a "numerosos desafíos ocasionados por la desaparición de muchas cañadas reales y veredas".

Además, apunta, cada vez se hace más complicado dado que llueve menos, "con lo que hay menos agua donde poder parar para que beba el ganado".

Aunque ha hecho el trayecto en multitud de ocasiones, las primeras veces acompañando y ayudando a su padre, dice que cada año es "completamente diferente". El objetivo es abandonar el frio para encontrar la mejor temperatura para su rebaño.

"Ahora en Capileira nos llega la nieve, por lo que tenemos que bajar a la Costa Tropical, donde estaremos unos cinco meses para después hacer el recorrido inverso", señala.

Dice que su plan es regresar a la Alpujarra a mediados de abril, cuando comiencen los calores en el litoral, y de esa forma poder iniciar un nuevo ciclo de la trashumancia.