Montefrío y Japón, más unidos que nunca

Veinte horas de viaje en avión separan a Montefrío –la famosa localidad del poniente granadino por su mirador National Geographic– con el municipio de Yasuda en la provincia de Kochi, localizado en Japón, el heterogéneo y pintoresco país conocido por sus legendarios guerreros (los samuráis) su gastronomía (sushi), su industria del cómic y un sinfín más de particularidades.

Aunque la distancia sea mucha, Montefrío y el antiguo Imperio del Sol Naciente han vuelto este fin de semana a estar más cerca que nunca gracias a las segundas Jornadas de Hermanamiento entre estudiantes de la localidad andaluza y Yasuda, pueblo situado en la provincia de Kochi con el que se hermanó en octubre de 2017.

Una decena de alumnos del IES Hiponova de entre 10 y 12 años conectaron en directo por videoconferencia con estudiantes del instituto de Yasuda desde el Mirador National Geographic. Desde el enclave les han mostrado las famosas vistas que cautivaron a la revista de viajes y que cada día contemplan cientos de turistas.

Además, el objetivo era que los niños practiquen su inglés y estrechen lazos con sus “hermanos” japoneses.

Durante la videoconferencia con Japón, los jóvenes de ambos países eligieron los temas sobre los que querían tratar, informaron desde el Ayuntamiento de la localidad del poniente granadino.

“Con esta actividad, que celebramos por segundo año consecutivo, queremos reflejar la conexión tan especial que existe entre Montefrío y Japón, y fomentar la relación entre los niños de ambos municipios”, explicó el teniente de alcalde de la localidad, Agustín García, en declaraciones recogidas por Efe.

Montefrío se convirtió en octubre de 2017, cuando el alcalde de Yasuda visitó el municipio granadino, en el primer pueblo de la provincia de Granada que se hermanó con Japón, y el cuarto de toda Andalucía.

El objetivo es que este acuerdo de hermanamiento tenga un reflejo directo en el comercio de Montefrío, ya que en virtud del mismo, el municipio granadino ya intercambia aceite de oliva virgen, que se vende en las tiendas de Yasuda, por licor de yuzu. Pero el vínculo del municipio con el país nipón también es nupcial, porque desde hace años es el escenario de numerosas bodas japonesas.