El parqué
Álvaro Romero
Tono alcista
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Granada/La temporada de recogida de la aceituna ya ha comenzado... En el Parque de las Ciencias de Granada. Se trata de una actividad anual que consiste en recoger la aceituna de los olivos centenarios que, junto a la Almazara de mediados del siglo XX y el empiedro del XVIII, forman el Área Etnobotánica del museo. La acción se realiza junto a la Fundación Caja Rural.
Los visitantes del museo y estudiantes de quinto curso de Primaria del colegio Parque de las Infantas participaron durante la mañana del martes en esta actividad en la que han podido observar en directo y colaborar en la recogida de este fruto, a la par que han intercambiado opiniones y experiencias y resuelto sus dudas con los responsables del olivar y de la Almazara que han dirigido la jornada.
También han tenido la oportunidad de dialogar con científicos y conocer los efectos saludables que tiene el consumo del aceite de oliva. El investigador del Departamento de Enfermería de la Universidad de Granada, César Hueso-Montoro, ha expuesto algunos de los resultados de su grupo de investigación en relación a la aplicación del aceite de oliva en crema para paliar los efectos en la piel de los enfermos ostomizados.
Además, un grupo de escolares y profesores del CEIP Parque de las Infantas ha participado en una actividad sensorial organizada por el Departamento de Educación y Actividades del Parque de las Ciencias, a través de la cual han tenido la oportunidad de aprender a distinguir las cualidades olfativas, gustativas y visuales de tres variedades diferentes de aceite de oliva.
Esta iniciativa ha ofrecido una visión global de todos los aspectos científicos, sociales, culturales y económicos que giran en torno al aceite de oliva y su producción.
Para la organización de este programa de difusión del patrimonio material e inmaterial del olivar, el Parque de las Ciencias cuenta con la colaboración de la Fundación Caja Rural Granada, que apoya durante todo el año las acciones educativas y de comunicación impulsadas por el museo para poner en valor la cultura del aceite y mostrar el desarrollo científico y tecnológico que conlleva. En la actividad han estado presentes la responsable de la Fundación Caja Rural Granada, Poli Servián y el director del Parque de las Ciencias, Luis Alcalá.
Poli Servián ha subrayado la relevancia que tiene para Fundación Caja Rural impulsar esta actividad, al tratarse de una entidad "vinculada al mundo de la agricultura desde su creación". Asimismo, ha manifestado la "satisfacción" de la Fundación por colaborar en este programa que se suma a otras iniciativas que ya desarrollan para la promoción del valor cultural, económico, social y científico del sector olivarero, como la organización de cursos, conferencias, jornadas o la edición de publicaciones especializadas.
Durante la jornada se ha invitado a los visitantes a participar en las tareas del vareo y en la recogida posterior del fruto para aprender en primera persona cómo se realiza este trabajo. Al mismo tiempo han conocido vocabulario propio del cultivo del olivo como el nombre de los aperos que se emplean en la labor.
La actividad ha incluido también visitas guiadas a la Almazara. Se trata de una pieza de patrimonio industrial que fue cedida por la familia Martín Martín y que estuvo en uso hasta el año 1972 en Padul. Para mostrarla al público, se realizó una restauración funcional que ha permitido que los visitantes vean en directo cómo se obtenía el aceite en una Almazara con tecnología que estuvo en uso hasta mediados del siglo XX.
En esta actividad se da a conocer el proceso de producción del aceite: la aceituna llega a la Almazara y en primer lugar se limpia, después pasa al tornillo sinfín y de ahí al empiedro o molino donde se moltura hasta conseguir una masa; que pasa a la batidora donde se mejoran las condiciones de extracción del aceite y finalmente acabará en la prensa. De esta primera prensada se obtiene el aceite virgen extra. La jornada se ha completado con una sabrosa degustación de pan con aceite.
El Área Etnobotánica, además de tener un valor educativo que permite conocer un cultivo y una actividad arraigada en nuestra historia, es una muestra de conservación del patrimonio, tanto natural, ya que todos los olivos cuentan con más de 100 años, como industrial y preindustrial, con la exposición y puesta en valor de la almazara y del empiedro de tracción animal del siglo XVIII.
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