"La república independiente" de la Costa Tropical, el chiringuito de la Rijana cumple 30 años

Antonio Legaza afirma entre risas que le encantaría dedicarse a instaurar "la república independiente de la Rijana". Este empresario y chiringuitero posa cada día un pedacito de su corazón en una de las calas más encantadoras, naturales y biodiversas de la Costa Tropical. También de las favoritas de los amantes de esas playas que aún guardan su espírirtu salvaje y desde donde no hay manera de ver asfalto, un edificio o escuchar un coche cercano.

Legaza es el orgulloso dueño del Chiringuito La Rijana, un establecimiento a pie de mar que, como su cala, tiene en su impronta la forma de vida natural. El espacio cumple 30 años desde que está a cargo de Legaza, aunque antes de él hubo otras dos concesiones. "Lo cogí cuando era un 'chambao'", explica Antonio que resalta que desde aquel momento su intención siempre ha sido que su chiringuito fuera tan auténtico y 'salvaje' como el entorno que lo rodea.

"Cuando llegamos era un desierto, por eso lo primero que hicimos fue ponernos a sembrar árboles y verde, es la labor del chiringuitero", además, en la Rijana es relativamente sencillo llenar de verde el entorno porque cuenta con agua dulce. "En la Rijana queremos que todo sea lo más natural posible, no como los chiringuitos ahora, que son restaurantes", cuenta orgulloso este granadino que, incluso, elabora en invierno el cañizo que cubre los techos.

Sobre 'su' playa, la Rijana, dice que es de los pocos lugares naturales que quedan en la Costa Tropical, aunque tenga chiriguito, por eso, su intención es que haya máxima armonía entre su establecimiento y el espacio. "Aquí han intentado hacer proyectos de hoteles, chalets de lujo e incluso un puerto", añade el chiringuitero que, concreta, "gracias a los ecologistas nada de eso siguió para adelante".

La fiesta de aniversario: " "la fiesta y el color lo ponen los clientes"

En estos 30 años, Legaza se ha hecho uno con su establecimiento y la cala, por este motivo ha querido celebrar el cumpleaños en forma de gran fiesta donde la música, la cultura y el respeto y comunión con el entorno serán las claves. La organización del evento, que tendrá lugar mañana viernes a partir de las 20 horas, estará a cargo de La casa rosa, una editorial, discografica y empresa de gestión cultural granadina.

Para Antonio, cuando se le pregunta qué espera de este aniversario, reflexiona y sentencia que "la fiesta y el color lo ponen los clientes". Espera, cuenta, ver caras de hace 30 años, "gente maravillosa que no eran clientes, eran amigos".

El cariño que destila Antonio al hablar de su establecimiento y de todo lo que le ha rodeado en estos 30 años es palpable: "hemos pasado noches estupendas, familias jóvenes con hijos, médicos, profesores de universidad... era un ambiente muy bueno", recuerda y, además, añade entre risas que ahí "se han criado muchos niños". Quiere que la fiesta de mañana tenga todo eso: "ambiente tranquilo y selecto".

Inmediantamente después, Antonio subraya que "de ninguna manera" quiere ver al día siguiente "imágenes como las de la playa de Calahonda tras las fiestas", por eso espera que los asistentes "se porten bien porque si no, no hace ninguna más". Este hombre, al que se le nota a partes iguales el amor por esta cala así como su respeto hacia el entorno natural, cumple 30 años 'a cargo' de esta playa, que viste y verdea para darle ese toque sin duda especial que tiene la Rijana y por lo que es una de las orillas más famosas de la Costa Tropical.

Música hasta ver amanecer en la Rijana

La fiesta, explican desde La casa rosa, durará desde las ocho de la tarde hasta las seis de la mañana y en él habrá música en directo de diferentes géneros y sesiones musicales de distintos selectores procedentes de Granada, Córdoba e Inglaterra. El aforo estará limitado a doscientas personas y pretende ser una "experiencia única en la que se mezclen el paisaje idílico de la Rijana y música elaborada y pinchada por artistas que atesoran gusto y calidad". El precio de la entrada es de 10 euros con una copa o dos cervezas con un aforo muy limitado y se pueden comprar en la página web de La casa rosa.

La intención de La casa rosa es, argumentan, "asentar una fiesta exclusiva en la que los asistentes, tanto locales como foráneos, puedan disfrutar de un evento de calidad musical en ese lugar idílico de nuestra costa y poco a poco se pueda ir convirtiendo en algo especial y más trascendente".

El cartel lo conforman selectores y divulgadores musicales de diferentes lugares de Andalucía y el inglés afincado en la subbética cordobesa Andrew Foster. La celebración empezará a las 20:00 horas con una sesión de Cisco Es, artista plástico y melómano que "seducirá con sus vinilos de jazz, de reggae y de música mediterránea y del mundo". Él inaugurará la Fiesta 30 aniversario del chiringuito de la Rijana y conducirá a los asistentes sonoramente hasta el atardecer.

A las 22:00 horas comenzará la música en directo con Peté, "un joven cordobés improvisador de rap, que debutará en la Rijana como compositor con tres canciones directas y emocionantes, sin estribillo y con una poesía limpia y honrosa que te golpea con la fuerza de la palabra y de imagénes sencillas".

Las bases, de una calidad importante, se las ha hecho el músico Jesús Ortiz usando "instrumentos orgánicos como el piano y con el apoyo rítmico propio del género. Este músico que acompaña a Peté en los platos después nos hará una intervención sonora con plantas y sintetizadores a la que ha llamado “El sonido de las plantas”. "En ella podremos disfrutar de cómo generan sonido las hojas de las macetas conforme las va tocando con sus dedos", subraya la empresa de gestión cultural.

Y para terminar con la música en directo Mancebo azor presentará su futuro disco en formato vinilo que publicará en otoño con el sello discográfico La casa rosa. A continuación volverían las sesiones musicales con Habibi. "Un selector, divulgador e investigador de nuevas tendencias musicales, vinculadas principalmente con las músicas electrónicas del mundo, jazz, experimentales y orgánicas", agregan.

Su sesión de la Rijana se enmarcará dentro de la electrónica de baile con ligeros toques ácidos y oscuros. Después intervendrá el inclasificable y sorprendente Andrew Foster con una sesión que promete ser singular. Y para terminar y preparar la noche para la llegada del amanecer Toni Romero y David Beltrán irán subiendo los b.p.m. hasta que la luz devuelva el día a la cala de la Rijana.