¿Qué será del mítico hotel San Antón de Granada tras la compra del edificio?

Vistas a la Alhambra y a la Sierra, una terraza panorámica de 360º con piscina, cuatro salas de reuniones, un gran lobby de dos alturas, tres zonas de comida y bebida y 189 habitaciones. Este es el mítico hotel San Antón, un baluarte granadino que en los últimos tiempos ha pasado por algunas calamidades y que, al fin, parece que va a remontar y regresar a su estatus natural: ofrecer uno de los alojamientos más ilustres de Granada.

Pero, qué pasó con el hotel San Antón para que, en ocasiones, los granadinos no hayan tenido claro cuándo estaba abierto o cerrado, ni por qué razones uno de los edificios más conocidos de la ciudad ha pasado por momentos en los que parecía el fantasma de sí mismo.

Qué pasó en el hotel: vaivenes que acabaron en abandono

Esta historia comenzó en 2014 cuando por primera vez desde su inauguración en 1993, y tras 21 años funcionando de forma ininterrumpida, el hotel cerró su persiana. El coloso verde, esquina entre San Antón y Ribera del Genil, fue construido en 1992 por Ávilas Rojas y ejerció de 'compañero' hotelero del Palacio de Congresos, situado prácticamente enfrente.

El constructor granadino entregó la gestión a su propia cadena hotelera, Etursa Hoteles, hasta el año 2006, cuando decidió venderlo a la cadena Hoteles Citymar. En 2013 el San Antón, vuelve a cambiar de manos, al menos relativamente, ya que Citymar se une ese año a Marvel para crear la compañía Vita Hoteliers. Esta gestión duró poco, ya que en 2014 se produjo el cierre del hotel pese a que la cadena Citymar tenía un arrendamiento de 25 años desde el 2008, o sea, aún ahora estaría vigente.

Desde entonces y hasta 2017 estuvo cerrado. En ese año la cadena catalana Ohtels Hotels & Resorts se hizo cargo del establecimiento para darle una nueva identidad de hotel urbano en el desembarco de esta cadena en Granada.

Al poco tiempo llegó la pandemia y tuvo que volver a cerrar durante el confinamiento. Después pudo reabrir con la reactivación de los viajes y la movilidad pero también duró poco en activo. Los últimos en gestionarlo fueron Ohtels, que cerraron el 4 de enero del pasado año, momento a partir del cual el hotel lució su peor estado: imagen de abandono, persianas cerradas y un interior que se intuía lejanamente lujoso.

Un nuevo futuro

Ahora, el hotel de cuatro estrellas está a la espera de que su nuevo dueño le devuelva el brillo perdido. Tras quedar desierta la subasta y estando en concurso de acreedores, había varias ofertas por él pero ha sido el grupo hotelero Hotusa el que ha cerrado la operación y que lo incluirá bajo la marca Eurostars.

“La venta del Hotel San Antón no solo supone un hito importante en el negocio inmobiliario de Granada por ser una de las construcciones más significativas de la ciudad, sino que la operación también muestra el interés por el reposicionamiento de la planta hotelera en todas las ciudades españolas con turismo consolidado”, señalaba Javier Oroz, director de Hoteles en Savills, consultora inmobiliaria internacional que ha asesorado al grupo en la operación.