El ovni que 'visitó' Motril en 1979: tres luces y un "hola, hola, cómo estás" por radio

España tiene su propio 'Libro azul', ese conjunto de documentos y registros de Defensa sobre los fenómenos 'ovni' sin explicación que se han producido en los cielos patrios. El 'Blue book' de los estadounidenses se recopiló entre 1947 y 1969, y el español vio la luz en 2016 tras la publicación de 1.900 páginas de Expedientes ovni en toda España que se remontan a 1962, donde se observó un 'platillo volante' por primera vez en Murcia.

Uno de esos 80 informes desclasificados y publicados por el Ministerio de Defensa incluye el caso del Objeto Volador No Identificado que 'jugueteó' con un piloto del ejército en 1979 y que, persiguiéndolo, le llevó hasta Motril. El único caso granadino se conoce gracias a que el informe fue desclasificado en 1994 por, además de su fiabilidad, no contener material 'sensible' que pudiese convertirlo en material susceptible de mantenerse bajo la etiqueta de 'clasificada'.

Escrito a máquina y sellado como "confidencial"

El proceso de desclasificación de los Expedientes ovni lo comenzó el Ministerio de Defensa en 1991. Hasta 2016 tan solo podían ser conocidos por aquellos que visitasen la sede del Ejército del Aire y se interesaran por ellos. Por suerte para los amantes de la ufología, ahora también se puede acceder a ellos de forma pública por internet.

El informe del "avistamiento de fenómenos extraños" en la Costa Tropical incluye los casos de Valencia y Madrid, al encontrarse dentro de una serie de sucesos ocurridos entre el 11 y el 28 de noviembre de 1979.

El expediente, escrito a máquina y sellado con una reconocible marca que dice: "Confidencial", comparte folio con otra que señala que ya está "Desclasificado". El caso granadino apenas se extiende tres párrafos, aunque es, por el propio relato, más que suficiente para narrar un encuentro inexplicable entre un piloto de caza español y un objeto volador no identificado que le lanzó un inquietante "hola, ¿cómo estás" a través de la radio.

Risas infantiles y un "Hola, ¿cómo estás?"

Los testigos del suceso son un controlador aéreo y un piloto de caza que despegaba de Albacete (de ambos se reserva la identidad). El informe cuenta que ambos se encontraron un fenómeno extraño en el cielo: "tres luces fuertes del mismo color e intensidad formando un triángulo isósceles".

A continuación el piloto se dispuso a perseguirlo para intentar cerciorarse de su origen con lo que "puso rumbo hacia el centro del triángulo de luces". Para su sorpresa, cuenta el informe desclasificado, "la distancia relativa no disminuía en ningún momento" por lo que, después de 10 minutos volando hacia los tres puntos de luz y ya en el espacio aéreo de Motril, el caza dio la vuelta para regresar a Albacete.

Aquí es donde la historia se torna un poco más inquietante, sobre todo si el público se pone en la piel de aquel militar solo en su cabina. El piloto comienza a escuchar unas interferencias en el canal de radio y, a continuación, unas voces que se dirigen, se entiende, a él. "Escuchó en el canal 11 de UHF, que estaba enlazando con Pegaso, unas voces infantiles que reían y decían; "Hola, ¿cómo estás?... hola, hola...", dice el documento de Defensa.

A continuación, el piloto de caza "tuvo el tiempo justo para quitar el canal de guardia y comprobar que las voces seguían entrando por el canal 11 con la misma nitidez y claridad. La interferencia duró unos 30 segundos". Después de esa extraña 'conexión', relata el informe, el militar tomó tierra "sin novedad" a las 18 horas en Albacete.

El cielo estaba despejado, había buena visibilidad y dos testigos que coincidían. A la luz de esto, y de nuevo según el documento desclasificado, "se les puede dar un alto grado de fiabilidad", a lo que se añade que, en ese mismo mes tuvieron lugar otros dos relatos parecidos en Madrid y Valencia.

El día 11 de ese mismo mes ocurrieron unos fenómenos similares en Valencia, y el 28 también se produjeron otros en Madrid. Por ello, Defensa incluyó lo ocurrido en Motril en el mismo informe. De los sucesos, el informe también señala que las "inversiones de temperaturas" habrían podido en alguno de tres casos lo que denominan "fenómenos de refracción". Se descartó que las luces fuesen naves y que "en ningún momento se demostró que fueses objetos consistentes" además de que la identificación de las luces fue "dudosa". En cualquier caso, el relato de Motril consta entre los denominados por Defensa como "fenómenos extraños".