Historias de Corpus: Cuando un belga consiguió despegar el primer avión desde Granada hace más de 100 años

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Con la exhibición del piloto, cuando pocos en España aún había probado el sabor de las nubes, comenzó una parte sustancial de la historia de la aeronáutica con base en Granada

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Historias de Corpus: Cuando un belga consiguió despegar el primer avión desde Granada hace más de 100 años
Historias de Corpus: Cuando un belga consiguió despegar el primer avión desde Granada hace más de 100 años

Sucedió durante un Corpus hace más de 100 años. Con la celebración de la efeméride más famosa y populosa de esta ciudad, por primera vez, los granadinos vieron cómo un avión levantaba el vuelo y surcaba sus cielos. La hazaña sucedía dos años después de que otro artefacto a motor lo consiguiera por primera vez en España. En Armilla comenzó la historia de la aviación granadina en 1911.

Todo estaba programado para que sucediese un año antes, en 1910, y siempre con el Corpus Christi como marco de la celebración pero el tiempo no acompañó a lo que se convertiría en un vuelo para la historia, por lo que tuvo que postergarse al año siguiente, también en días de feria.

Tanto ese primer intento fallido, como los que sucederían con posterioridad fue convocado por la comisión de fiestas del Ayuntamiento de Granada: se trataba de un concurso de aviación cuando, precisamente, esta disciplina aún daba sus primeros pasos.

Dos pilotos y solo un avión en el cielo

Llegó 1911 y, usando como base unos terrenos situados en los llanos de la cercana población de Armilla, un español y un belga se dieron cita para comenzar su competición. Los pilotos eran Granell, de nacionalidad española, y el belga Jules Tick y, nada más comenzar la exhibición la suerte se alejó de la patria.

El español apenas logró despegar cuando su avión se rompió, por lo que Tick alzó el vuelo en solitario manejando su Bleriot II tipo Canal de la Mancha y ahí sucedió la proeza: surcó los cielos de Armilla y Alhendín durante casi 5 minutos y a 50 metros de altura. Las nubes de Granada vieron por primera vez en su historia cómo algo que no era un ave cruzaba sus dominios.

Pero la hazaña se quedó obsoleta en apenas unas horas. Días después y ya con un público experto como testigo (responsables de la aeronáutica pertenecientes al cuerpo de Ingenieros del Ejército de Tierra) el belga logró subir a una altura de 250 metros.

De este modo daba comienzo lo que se convirtió en una cita anual coincidente con el Corpus que ganó cuerpo y entidad año a año. Las exhibiciones de aviación dieron lugar en 1914 a la celebración de un gran concurso. Con el certamen, además, se inició la actividad de Real Aeroclub de Granada como sección delegada del correspondiente Real Aeroclub de España, siendo Granada, a partir de entonces un emblema de la aviación nacional.

De parcela de festivales a uso militar y luego comercial

Según información de Aena, el recinto pasó de ser centro de festivales y exhibiciones tener un uso militar. "La guerra con Marruecos impulsó la necesidad de construir un aeródromo militar permanente que sirviera de apoyo a la aviación que participaba en el conflicto", fue entonces cuando el Ayuntamiento de Granada donó los terrenos en los que se celebraban los festivales. "El aeródromo se inauguró en junio de 1922 y contaba con talleres, almacenes, pabellones para oficiales y soldados, estación de telegrafía y dos hangares de lona con capacidad para diecisiete aeronaves cada uno. En 1925 recibió el nombre de Aeródromo Dávila, en memoria de Luis Dávila Ponce de León".

Finalizó la guerra y el recinto pasó a ser auxiliar de Sevilla. En 1929 se inauguró la primera línea de tráfico civil entre Granada y Sevilla que, no obstante no duró ni un año. "Dedicado nuevamente a operaciones exclusivamente militares durante la guerra civil, el aeródromo volvió a abrirse definitivamente en 1946 al tráfico civil, nacional completo, internacional de turismo y escalas técnicas comerciales".

Armilla pudo tener aeropuerto... pero no

A lo largo de la década de los 50 el aeropuerto de Armilla creció paulatinamente y consiguió infraestructuras y usos como "una torre de mando en 1952, un edificio para aviación civil a instancias de Aviaco en 1954, una escuela de pilotos en 1955, etc".

Pero los aires granadinos siempre gozaron de una mala salud de hierro y, sin embargo, "el poco éxito de las líneas operadas y la falta de una pista afirmada para que pudieran operar los nuevos aviones" dieron lugar, ya en los sesenta, a que se iniciara la construcción de un nuevo aeropuerto entre Chauchina y Santa Fe.

Las obras del nuevo aeródromo no comenzaron hasta 1970 (y hasta 2006 no se llamó oficialmente Federico García Lorca Granada-Jaén) y se inauguró el 15 de junio de 1972 con tráfico nacional e internacional, para pasajeros y mercancías.

Hace 30 años, a comienzos de los noventa el aeropuerto tuvo su primer lavado de cara. Fue gracias a la "designación de Granada como sede del Campeonato Mundial de Esquí de 1995", cuando las instalaciones se mejoraron sustancialmente. "Las principales obras fueron la ampliación del estacionamiento de aviones, el recrecido de la pista de vuelo, la remodelación de la central eléctrica, la construcción de un edificio administrativo para Aena y la aviación general, y la ampliación y urbanización del edificio terminal".

Y así, con la exhibición de un belga cuando pocos en España aún habían probado el sabor de las nubes, comenzó una parte sustancial de la historia de la aeronáutica. Fue en Granada y durante un Corpus.

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