Este es el pueblo del pan de Granada: el 'horno' andaluz con sello de calidad IGP famoso en toda España
El Pan de Alfacar cuenta con el Sello de Calidad Diferenciada IGP, uno de los cuatro de todo el país
El pueblo de Granada con la "cueva inundada más profunda de España" recién descubierta

Su nombre dio la vuelta a España hace casi tres años cuando se hizo con el trofeo del Grand Prix, el famoso programa de TVE. No obstante, este pueblo de Granada es famoso desde hace décadas por el fruto de sus hornos. Los locales que quieren presumir del pan que venden nunca dejan de reseñar en carteles que su pan es de Alfacar.
De hecho, el reconocimiento a la tarea de abastecer del mejor pan a toda Granada y más allá le llegó hace unos años, cuando el Pan de Alfacar recibió el Sello de Calidad Diferenciada IGP (Indicación Geográfica Protegida) con alcance geográfico de Alfacar y Víznar. Es uno de los cuatro IGP de España y los que completan la lista son el IGP Pan de Cea, IGP Pan de Cruz de Ciudad Real y IGP Pa de Pagès Català.
El secreto está en el agua
El Pan de Alfacar puede presentarse en bollo, rosco, rosca y hogaza, obtenidos a partir de una misma masa de origen, según recoge la web de Alimentos de España y su particular sabor y textura viene de un elemento esencial, su agua.
Según reseña Alimentos de España "para su elaboración se utiliza el agua procedente del acuífero de Fuente Grande y masa madre natural" y su forma es alargada "con un única greña de gran abertura y poca profundidad, con poco brillo y escasa harina en la superficie". Su corteza es crujiente y no muy gruesa, de color oscuro tostado y su miga es irregular y con alvéolos poco homogéneos, completan.
Una receta que se transmite de generación en generación
De padres a hijos, de abuelas a nietos, así es como ha pervivido la receta de este producto único. Como apuntan desde el Ayuntamiento de Alfacar "se ha transmitido entre generaciones de panaderos que han dado a conocer este producto dentro y fuera de la provincia" y añaden que, además de las aguas de sus manantiales, los recursos locales para la elaboración de sus panes siguen siendo "la leña de los bosques de la Alfaguara para la cocción en hornos morunos, el tomillo y el romero que le daban aroma además de los antiguos molinos harineros que suministraban la harina a los panaderos".
Desde la conquista de Granada
La historia del Pan de Alfacar se remonta a la conquista cristiana del Reino de Granada, a finales del siglo XV. Registran en su Consistorio que "se pueden encontrar documentos históricos del siglo XVI (Libros de Apeo y Repartimiento de Alfacar) que ya demuestran la importancia de la tradición panadera de Alfacar mencionando el número de molinos y hornos".
A lo largo de los siglos la industria panadera de la zona se fue afianzando y cobró cada vez mayor relevancia hasta que ya en el siglo XX, en 1950, "Alfacar domina la fabricación de pan en el entorno granadino". En esa década ya contaba con "9 hornos y 41 panaderos y comerciándose en la capital 7.000 kilos diarios de Pan de Alfacar de excelente calidad y muy apreciado, como indica Bosque Maurel", recoge el Ayuntamiento.
También te puede interesar