Los pueblos donde mejor se come de Granada y sus restaurantes, según National Geographic

Algunos tienen reconocimientos de la Guía Michelin, de entidades locales o andaluzas y, otros, son merecedores de su fama por la acumulación de piropos durante décadas

Los 10 restaurantes 'top' de Granada para este 2025, según The Fork

Imagen del restaurante Ruta del Veleta, uno de los mencionados.
Imagen del restaurante Ruta del Veleta, uno de los mencionados. / G. H.

Ocho pueblos y ocho restaurantes que son bandera gastronómica de su localidad y del territorio granadino. Más allá de los grandes nombres de la capital, en la provincia de Granada se come de 10 y los múltiples reconocimientos a las cocinas de sus municipios, como los que se citan a continuación, dan fe de ello.

Los restaurantes en los que se ha fijado National Geographic desde su punto de vista más gastro son muy conocidos en estas tierras, algunos tienen reconocimientos de la Guía Michelin, de entidades locales o andaluzas y, otros, son merecedores de su fama por la acumulación durante décadas de piropos transmitidos por el boca a boca.

Cenes de la Vega

La guía gastronómica de la revista comienza por un peso pesado de la gastronomía 100% granadina, el restaurante Ruta del Veleta, en Cenes de la Vega. El establecimiento de los hermanos Pedraza nacido en 1976 bien podría ser parte del escudo de Granada por su solera y por la fama gastronómica que le ha granjeado a la provincia desde entonces.

Motril

La siguiente parada en el viaje gastro granadino está en la Costa Tropical, en la ciudad de Motril y en su Espacio IME. La reseña de National Geographic cita sus "detalles de autor, claridad y apuesta por el producto en un restaurante fundamental en el litoral granadino" y hace alusión al producto que usa Iván Mateo en sus fogones: "las quisquillas, pero también con la caballa o con la recuperación de recetas como las espichás, una receta motrileña a base de boquerones secos".

Loja

"Un lugar ideal para entregarse a carnes, detalles de pescados y probar una de las mejores croquetas de la provincia de Granada", es la premisa de la que parte el autor del reportaje cuando se acerca a El Flati, de Loja. Del restaurante o mejor dicho "refugio gastronómico", recoge sus "recetas tradicionales y cocina a la brasa sin paños calientes".

Monachil

De camino a Sierra Nevada encontramos un viejo amigo de los premios y reconocimientos gastronómicos, La Cantina de Diego. La Guía Michelin otorgó el título de Bib Gourmand (restaurantes con mejor relación calidad-precio) a este establecimiento que tiene su depensa en la misma tierra de su huerto. Tal y como recuerda la publicación, en la Cantina de Diego, "bajo una cocina eminentemente vegetal, Diego Higueras hace a la vez de chef y agricultor para poner en su restaurante lo que custodia y cosecha en su propia huerta".

Calahonda

Como un "stop obligatorio en Calahonda" definen a El Conjuro, un restaurante de mar donde los hermanos Lorenzo Torres hacen las delicias de las papilas gustativas desde 1989. National Geographic recuerda que "chipirones, calamares, ortiguilla, puntillas o navajas comparten escenario con arroces y detalles de cocina a la brasa".

Lanjarón

Entrando en una de las comarcas con mayor encanto y fama turística de la provincia de Granada, La Alpujarra, hace parada la publicación para recomendar otro de los puntos clave de la gastronomía del territorio.

En Lanjarón vive el hotel Alcadima y su restaurante donde, reseñan, se reviven algunos de los platos habituales de la cocina local alpujarreña. Desde el típico y "reconstituyente" plato alpujarreño, pasado por platos verdes "donde la berenjena, el espárrago y la alcachofa no faltan" hasta llegar a "elementos tropicales de proximidad como aguacates, mangos o chirimoyasindispensables en la nueva cocina andaluza".

Loja

La revista hace de nuevo parada en Loja, esta vez para llevarnos hasta el único restaurante con Estrella Michelin de Granada, por el momento. El restaurante La Finca, dentro de La Bobadilla, a Royal Hideaway Hotel, es un paraíso gastronómico del que dice el reportaje que la "recuperación de recetario, proveedores locales, autosuficiencia en la medida de lo posible y un espacio único –incluyendo una pequeña capilla– glosan los encantos de La Finca que, además, se consolida con opciones como El Cortijo o El Mirador para ofrecer una panorámica gastronómica de 360 grados.

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