El renacer del Hotel San Antón: la séptima vida de un coloso histórico de Granada

No hace aún siquiera un mes, desde el 27 de diciembre, el mítico Hotel San Antón abría de nuevo sus puertas y se estrenaba como el séptimo hotel en Granada de la marca Eurostars, propiedad del grupo Hotusa.

Y, si de 'sietes' va la cosa, también es la seis más una vida e identidad de un coloso que no ha sucumbido a los vaivenes producidos por los numerosos y, en ocasiones controvertidos, cambios de propietario. Pero, visto está, acaba cayendo siempre panza arriba.

Se mantiene en pie, recio y regio, tal como se proyectó en los años 90, como una de las señas de identidad de la 'nueva' Granada.

Este edificio, cerrado sine die por última vez en enero de 2023, nació a la lumbre de la modernidad recién adquirida de Granada en el año 1993 como tándem económico-turístico del Palacio de Congresos, hoy puede verse bajo nuevos rótulos y personalidad. El Eurostars San Antón conserva sus cuatro estrellas y, si bien su fachada mantiene la faz que le imprime solera, su interior es completamente nuevo.

El hotel cuenta con 173 habitaciones de distintos tamaños. Anteriormente el edificio ofrecía un total de 189 aunque algunas de ellas eran demasiado pequeñas o no cumplían los estándares de la nueva marca, explican desde la dirección del hotel, por lo que se decidió apostar por la remodelación y ampliación de algunas de las estancias que han ganado en comodidad y espacio, en detrimento del número de piezas.

Los huéspedes del hotel pueden elegir entre habitación individual (12 metros cuadrados), individual superior (15 metros cuadrados), doble (20 metros, pudiendo ser con o sin vistas), doble con sofá cama (25 m2) y Junior Suite (33 m2). En todas ellas el trabajo de interiorismo y arquitectura ha querido que se luzcan detalles alhambreños en sobrrerelieves, alfombras así como en columnas y otros rincones comunes del hotel. Como complemento, todas las habitaciones cuentan con servicio wifi, caja de seguridad, minibar, secador, teléfono, amenities (bajo petición) y hervidor de agua.

Una nueva vida interior

Sobre su nueva vida interior, el Hotel San Antón es un crisol de luminosidad tanto en estancias como en zonas colectivas, donde la luz entra por sus costados bien acristalados que aprovechan su ubicación que ocupa casi toda la manzana. Muestra de ello es la zona de desayuno, recién instalada mirando al río Genil, orientación Sur, que recibe sol desde dos de sus paredes.

En cuanto a su remodelación, además de su nuevo estilo donde reinan el blanco, el marrón casi negro y el dorado, Eurostars ha querido conservar piezas fundamentales e históricas del edificio como algunas de las piezas de mármol de sus suelos, la increíble escalera digna de ser pisada por Norma Desmond, las columnas originales (con nuevo revestimiento), los míticos ascensores acristalados así como sus preciosas molduras que aportan ese toque clásico guiño a alguno de sus múltiples pasados.

Terraza 360 grados

Una zona imprescindible del hotel es su terraza con vistas 360 grados que van de la más alejada Vega hasta un primer plano de la Alhambra, el Barranco del abogado, el Palace o Sierra Nevada.

En su terraza, como complemento, se ha instalado el restaurante Mirador, donde se puede tanto comer o cenar (siendo huésped o no) como tomar algo al aire libre o dentro de su salón. Porque la parte 'gastro' del San Antón bajo la marca Eurostars, confirman desde dirección, tendrá un gran peso dentro del hotel y de la propia ciudad. Plantean dedicarle en los próximos días un homenaje a su propia efeméride, San Antón, con unas jornadas gastronómicas en torno a la Olla además de celebrar otras tantas festividades granadinas con base en la cocina.

El espacio guarda también lugar para el recibimiento de eventos, empresas o equipos deportivos con un gran espacio que puede dividirse en tres y que, disipando los paneles que lo separan, cuenta con unos 500 metros cuadrados.

Camareras de piso aparte, este servicio está externalizado, el nuevo hotel cuenta con entre 25 y 26 trabajadores aunque, señalan, posiblemente la plantilla aumente en el futuro.

El brillo que ahora ha recuperado el Hotel San Antón con la firma Eurostars conlleva, también, una compensación a la ciudad, que durante años no sólo había perdido uno de sus edificios turísticos históricos, sino que también vio una de las esquinas del Centro de la ciudad en estado de semirruina.

Hasta que comenzaran las obras de rehabilitación y reforma, el coloso verde de la calle San Antón lucía una triste imagen de abandono, encerrado entre persianas a través de las cuales se podía intuir un pasado lejanamente lujoso.

Historia de vaivenes ante notario

La historia de los vaivenes ante notario del San Antón comenzó en 2014 cuando tras 21 años funcionando de forma ininterrumpida desde su estreno en 1993, el hotel cerró su persiana. El enorme edificio, complemento perfecto del novísimo centro económico,cultural y turístico Palacio de Congresos, fue construido en 1992 por Ávilas Rojas.

El constructor granadino entregó la gestión a su propia cadena hotelera, Etursa Hoteles, hasta el año 2006, cuando decidió venderlo a la cadena Hoteles Citymar. En 2013 el San Antón, vuelve a cambiar de manos, al menos relativamente, ya que Citymar se une ese año a Marvel para crear la compañía Vita Hoteliers. Esta gestión duró poco, ya que en 2014 se produjo el cierre del hotel pese a que la cadena Citymar tenía un arrendamiento de 25 años desde el 2008, o sea, aún ahora estaría vigente.

Desde entonces y hasta 2017 estuvo cerrado. En ese año la cadena catalana Ohtels Hotels & Resorts se hizo cargo del establecimiento para darle una nueva identidad de hotel urbano en el desembarco de esta cadena en Granada.

Al poco tiempo llegó la pandemia y tuvo que volver a cerrar durante el confinamiento. Después pudo reabrir con la reactivación de los viajes y la movilidad pero también duró poco en activo. Los últimos en gestionarlo fueron Ohtels, que cerraron el 4 de enero de 2023, momento a partir del cual lució su peor estado ahora resarcido bajo su nueva firma hotelera.