¿Qué tiburones y ballenas hay en la Costa Tropical de Granada?
En el mar granadino habitan más de treinta especies de tiburones, aunque solo algunos de ellos son peligrosos para el hombre
Existen cinco tipos de cetáceos que viven en las costas de Granada
El impresionante avistamiento de tres ballenas rorcuales en la Costa de Granada
Las espectaculares imágenes de un grupo de ballenas rorcuales en la costa granadina ha revolucionado a la población del litoral tropical. La belleza de tales animales en mar abierto siempre apabulla al tiempo que maravilla. Estos cetáceos, que pueden llegar a medir 27 metros y pesar alrededor de 70 toneladas son inofensivos aunque, sin poder evitarlo, el ser humano muchas veces recela al meterse en el mar y pasa a continuación a preguntarse, cuando el fondo bajo sus pies es completamente negro, "qué habrá ahí abajo". Porque, aunque también inofensivos en la mayoría de casos, en las aguas de Granada también viven tiburones, en concreto, más de 30 especies.
El fondo marino de la Costa Tropical es riquísimo en biodiversidad, cuestión que la convierte en uno de los destinos favoritos para el buceo. No en vano, La Asociación Observatorio del Mar, con el apoyo de la Diputación de Granada, acaba de publicar una nueva guía interactiva de cetáceos de la Costa granadina, a través de la cual se pretende que el avistamiento de estos colosos del mar emerja como un nuevo foco de captación del turismo.
En dicha guía se divulga las características de todos las especies de cetáceos de la costa de Granada, además de ofrecer un mapa donde señalan los hábitats de los distintos animales. No obstante, para dar a conocer los escualos de la Costa Tropical existe otra guía, llamada Tiburones de la Costa Tropical, editada por la Concejalía de Medioambiente del Ayuntamiento de Motril, donde Francisco José Pinto de la Rosa y Juan Jesús Bellido López trasladan todo lo que hay que saber sobre los distintos tipos de tiburones de Granada.
Los tiburones de la Costa Tropical
Según la guía, de las más de 450 especies de tiburones que existen en el mundo, la Costa Tropical está poblada por una treintena de ellas, enmarcadas en cinco tipos: Hexanchiformes, Squaliformes, Squatiniformes, Lamniformes y Carcharhiniformes. Algunas de estas especies se encuentran, según señalan los autores, en la lista roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), máxima autoridad en la materia, como especies "vulnerables" o en "peligro crítico de extinción" ya que muchas de ellas son consumidas por el ser humano y es común ver ejemplares en las lonjas. Estos animales jurásicos cuentan con siete sentidos y llegan a tener hasta unos 20.000 dientes en toda su vida.
Aunque muchos de ellos tienen una apariencia 'voraz' que rescata de 'los recuerdos de Vietnam' aquellos acordes del Tiburón de Spielberg, la mayoría son inofensivos para el hombre aunque sus fauces y tamaño, eso hay que reconocerlo, asustaría a cualquiera de encontrárselo, por ejemplo, en un baño veraniego en Almuñécar o Calahonda.
Sí es cierto que, algunas especies como el Marrajo (3.9 metros de longitud máxima) y la Tintorera (3.8 metros de longitud máxima), vecinos conocidos de nuestras costas, sí son peligrosos para el hombre, aunque los casos de ataques son testimoniales, así lo recoge este estudio.
En las aguas de la Costa Tropical viven ejemplares de escualo de todos los tamaños: desde el Cañabota gris que mide cinco metros y no peligroso, pasando por el tiburón zorro, de 5 metros y no es peligroso pese a su aspecto o el muy conocido tiburón Peregrino, que puede alcanzar los 10 metros y es, también, inofensivo. Entre los más pequeños destaca el tiburón Negrito, de solo 60 cm como máximo y tampoco es peligroso.
Ballenas y delfines
El paseo de las ballenas rorcuales, también en peligro de extinción, por las aguas granadinas que tuvo lugar hace unos días ha levantado la curiosidad de muchos. Por qué han alegido esta zona dentro de su itinerario o si ese acercamiento es habitual en ellas son las principales preguntas que suscitan las impresionantes imágenes. Pero no es la primera vez que los vecinos de la Costa tropical se encuentran con estos magníficos cetáceos. El pasado año, en diciembre de 2023, los locales de la Herrradura pudieron ver dos ejemplares de las llamadas también ballenas de aleta en la zona de la Punta de la Mona. Se trata del segundo animal más grande del planeta tras la ballena azul, es una especie común en el Mar Mediterráneo y puede alcanzar una longitud de hasta 27 metros y pesar 70 toneladas.
Según la Fundación Aquae es común verlas en el Mediterráneo, se distribuye por la mayoría de los océanos de zonas templadas y polares y "No realizan migraciones como tal, pero sí pueden cambiar de hábitat dependiendo de la estación del año en la que nos encontremos. En lo que respecta a su comportamiento, el rorcual común puede moverse de dos formas bien diferenciadas: en solitario o en pequeños grupos".
En cuanto a sus compañeros cetáceos, conocidos por todos como delfines, en las costas granadinas, según la guía Tierra de Cetáceos de la Asociación Observatorio del Mar, existen cinco tipos. El delfín mular, quizás el más reconocible, de color gris con tonos azulados, morro corto y ancho y de 3,8 metros de longitud; el delfín común, de morro largo y delgado, con un círculo negro alrededor de a modo de antifaz, tonos amarillos en sus flancos y de 2,7 metros y el delfín listado, con el morro oscuro arriba y claro por debajo y 2.55 metros.
En cuanto a los gigantes de la Costa Tropical, la guía señala a las dos especies de calderones que conviven con el resto, el Calderón común, de cabeza redondeada y más pronunciada en los machos, una aleta dorsal muy grande y curva que puedemedir 7 metros y pesar hasta 3.600 kilos. Le acompaña el calderón gris, algo más pequeño (solo 4.3 metros y 680 kilos, de cabeza roma y abundantes marcas blancas alargadas a lo largo de su cuerpo.
El área de estudio de la guía del Obervatorio del Mar abarca desde la playa de Cantarriján en La Herradura hasta la tranquila playa del Pozuelo en Albuñol, cubriendo una porción estratégica de la vertiente norte del Mar de Alborán. El proyecto busca aprovechar las características únicas de la costa de Granada, promoviendo el turismo sostenible y la conservación marina a través de la observación de cetáceos. Esta iniciativa no solo contribuirá al desarrollo económico de la región, sino que también ayudará a preservar su rica biodiversidad marina.
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